Hace semanas les hablaba del descolón que los Oscars dió a Animales Nocturnos, una de las películas que en mi opinión es de las más efectivas en los últimos años. El gran problema, y seguramente motivador es que el escritor y director es Tom Ford, cuya fama se debe a su impecable desempeño en el diseño de moda (que por cierto se nota en la película, que tiene un gusto de precisión milimétrica), ya en esa ocasión escribía que para la academia el haber premiado o a menos nominado esta maravillosa cinta significaría una negación de la propia industria.
Algo similar puede pasar en México, pues hace algunas semanas se estrenó Mientra El Lobo No Está, una cinta que para mi sorpresa resultó de lo mejor que se ha visto en el cine mexicano en mucho tiempo pero además con una visión de cine mundial, no a la del pobrecito cine mexicano que nos hemos estado acostumbrando en nuestra quesque industria donde se pide “apoyo”.
Mientras El Lobo No Está cuenta la historia de un preadolescente que es llevado a un internado con olor a cárcel enclavado en un paraje forestal, del que además sólo existe una salida. En adelante conoceremos a los personajes del instituto, cómo construyen una amistad y el reto de escapar y ser dueño de su destino frente a un ambiente de abuso disfrazado de disciplina.
Puede pasar algo similar, porque la productora de este filme entrega un producto más sólido que la mayoría de las producciones nacionales siendo apenas su segunda incursión en el mundo cinematográfico. Magnífico Entertaiment es mejor conocido por producir teatro, pero en el pasado estuvo involucrado en la película Archivo 253, que seguía la tendencia del falso documental de terror y debo admitir que no soporté más allá de los primeros 20 minutos.
Mauricio García Lozano, que providencialmente también viene del mundo del teatro y recientemente dirigió la nueva puesta de El Hombre de la Mancha, encarna al personaje de mayor fuerza en la historia y aunque puede acusarse de ser un cine de fórmula, se debe aceptar que este tipo de esfuerzos son mucho más loables que las abominaciones que el cine mexicano nos ha regalado en el último año y que ni siquiera son originales.
Poco a poco Mientra El Lobo No Está ha llegado a su cuarta semana de exhibición dependiendo del boca a boca, pues aunque la inversión publicitaria es fuerte no ha habido eco en los medios y por ello lo comparo con el caso de Animales Nocturnos. Vale la pena ver una película bien escrita, bien retratada, bien dirigida, y cuyo único talón pudiera ser la actuación de niños que sabemos no siempre ser adorables.
