No todas las adaptaciones que se hacen sobre personajes de cómic tiene que ver con superhéroes, si bien son los que dominan el mercado y tienen una gran cantidad de seguidores también están aquellos que leen otro tipo de historias.
Podríamos definir que el cómic basado en la creación de Neil Gaiman como una fantasía oscura y horror sobrenatural que aborda temas más enfocados en los lectores maduros, durante años se planeó llevar a estos personajes a la pantalla grande pero, es evidente que la tecnología de hoy en día ha hecho posible lo que parecía imposible.
The Sandman ha hecho su debut en la pantalla chica y desde que se anunció ha estado rodeado de polémica como todo y los resultados han sido más que sorprendentes, habrá a quienes les guste y a quienes no pero aquí, estamos ante una serie como pocas se han hecho en los últimos años.
¿De qué va la serie?
The Sandman sigue a las personas y los lugares afectados por Morpheus (Tom Sturridge) el Rey del Sueño, mientras repara los errores que se han derivado de su larga ausencia, los humanos parece que no son tan conscientes de que existe este mundo como algo más allá de lo real lo que los llevará a cuestionarse su propia existencia.
La serie ha sido adaptada para la plataforma de Netflix por Allan Heinberg, David Goyer y el propio Gaiman, desde su primer episodio basado en The Sandman #1 – Sleep of the Just nos plantea que estamos ante algo completamente diferente y nos ubica cuando Morpheus ha sido capturado por Sir Roderick Burgess / Magus (Charles Dance) un ocultista aristocrático que quiere hacer un trato con él, lo liberará si trae de regreso a la vida a su hijo muerto, mantenido en cautiverio por 100 años, cuando logra escapar y volver a su reino cae en cuenta que ya nada es como antes, que han sucedido demasiadas cosas durante su ausencia, ahora tiene la labor de reconstruirse y reorientarse, ese proceso lo llevará a recordar cuál es su misión en este mundo y en el proceso estrechará lazos más profundos con los humanos así como a sus peculiares hermanos.
Adaptar este cómic no ha sido tarea fácil, lo que vemos como resultado final es una serie visualmente impactante, intentar reproducir lo que sucede en las viñetas a la acción real necesitaba de un gran talento narrativo y que sus creadores tuvieran una comprensión profunda y crítica para que todo cobrara vida y que esta se viera espectacular, su material base cuenta con un gran número de diseños y de personajes icónicos, mismos que se involucran en situaciones fantásticas que la televisión tradicional en aquellos años no podía representarlo de una manera más efectiva y convincente, algo que hoy en día es posible.
Los cómics en cualquier género son brillantemente complicados y asombrosamente hermosos de una manera en la que ningún otro medio pueda captar en su totalidad su esencia, cada dibujo, cada viñeta implica que no solo tener a un buen artista, también una buena historia, The Sandman tiene características muy específicas, su narrativa se basa en una secuencia de dibujos en donde vemos a los personajes interactuar con los demás de una manera dinámica que nos engancha para saber más sobre ellos y lo que sucederá.
Llevando como base el cómic cada capítulo pareciera ser independiente que de alguna manera lo es pero que a su vez se relaciona con todo lo demás, esas pequeñas y grandes sub tramas que nos presentan tienen una razón de ser y cada una de ellas es resuelta hacia el final, la primer temporada consta de 10 episodios y son:
1. Sleep of the Just:
Mientras Morpheus busca una pesadilla que se ha escapado del mundo de los sueños para refugiarse en el mundo de la vigilia cae prisionero de Roderick Burgess, un ocultista que busca invocar y encarcelar a la Muerte.
2. Imperfect Hosts:
Morpheus ha comenzado la búsqueda para encontrar sus herramientas que le han sido robadas, arena, un rubí y un yelmo, tendrá la ayuda de un par de hermanos disfuncionales.
3. Dream a Little Dream of Me:
Morpheus rastrea a la última persona conocida que ha tenido su arena y recibirá una inesperada lección sobre la humanidad.
4. A Hope in Hell:
Una pista sobre el paradero de su yelmo obliga a Morpheus a buscar una audiencia con Lucifer en el infierno.
5. 24/7:
John entra en un lejano restaurante para observar a las personas que lo rodean y pone a prueba su teoría sobre la verdad y las mentiras.
6. The Sound of Her Wings:
Sintiéndose un poco perdido Morpheus acompaña a su hermana Death en un día de trabajo, es ella la que le ofrece consejos y lo anima a visitar a un viejo, muy viejo conocido.
7. The Doll’s House:
Rose Walker ha sido separada de su hermano pequeño, 6 años más tarde irá en su busqueda por un camino singularmente siniestro, mientras que 3 asesinos buscan llamar la atención de Corinthian para invitarlo a una convención anual en donde será el invitado de honor, lo que no saben y no se imaginan es que no es humano y será su peor pesadilla.
8. Playing House:
Mientras Morpheus se acerca a una de sus creaciones desaparecidas Rose sigue en la búsqueda de su hermano y, sin casi darse cuenta hace realidad el sueño de su amiga.
9. Collectors:
Extraños temblores suceden en The Dreaming, Rose emprende un viaje por carretera con un nuevo amigo y The Corinthian llega con un invitado a una espeluznante convención.
10. Lost Hearts:
A medida que el vórtice entre el Sueño y la Vigilia se vuelve más poderoso los muros entre los reinos se debilitan, Rose debe tomar una decisión difícil que pueda salvar ambos mundos.
Cada episodio tiene su propia personalidad y su encanto, es cierto que estamos ante una obra muy difícil de ser adaptada al cine o la televisión, el resultado de esto ha superado las expectativas de algunos y ha sido una decepción para otros, los elementos clásicos del cómic son perfectamente bien combinados con la modernidad en la que vivimos, los cambios que presenta en la manera de estructurar la historia es meramente entendible así como los cambios en los personajes, han aplicado la regla de lo políticamente correcto e inclusivo, con y pese a eso su desarrollo es excelente.
Uno de los grandes puntos que tiene a favor es que, se puede ver y entender perfectamente bien sin nisiquiera haber leído un número de su material en cómic, los personajes están construídos sin mucho esfuerzo, su desarrollo y de cómo los vamos conociendo es sencillo y sin ser pretencioso y presuntuoso, las diferentes adaptaciones que han hecho en el guión Neil Gaiman, David S. Goyer, Allan Heinberg, Jim Campolongo, Austin Guzman, Ameni Rozsa, Lauren Bello, Heather Bellson, Alexander Newman-Wise, Vanessa James Benton y Jay Franklin describe perfectamente cómo es que deben ser y lucir estos seres en un live action, los directores, Mike Barker, Jamie Childs, Mairzee Almas, Andrés Baiz, Coralie Fargeat y Louise Hooper hacen de cada episodio algo maravilloso, cada uno tiene una idea propia de cómo trabajar y precisar lo que se nos está contando con un ritmo narrativo eficaz.
Y aunque los últimos cuatro episodios tienen más continuación con los anteriores son muy militantes a los cómics, por cuestiones de derechos en los personajes no pudimos ver a John Constantine, Etrigan the Demon y Martian Manhunter lo cual hubiese sido una locura, The Sandman es en esencia una historia sobre la naturaleza de las propias historias, y que estas cambian con el tiempo y como es necesario que evolucionen y se representen de manera moderna en la que nuevas generaciones puedan apreciarla en su propio contexto y forma.
Los fallos que tiene son pocos y refieren más al hecho de cómo han sido representados los personajes, básicamente tenemos que entender que no todo debe ser llevado a un punto exagerado, la serie juega bajo sus propias reglas en la que la base de todo es respetar la idea del material original y recrear lo más fiel posible aunque esto resulte sumamente difícil pero que aquí es llevado de la mejor manera para satisfacer a propios y extraños, otro punto es que la plataforma presentó de lleno todos los episodios y habría sido mejor un estreno por semana.
Los efectos especiales y de maquillaje juegan un papel de suma importancia en esta serie, podemos ver que algunos personajes secundarios no han sido tan cuidados como los principales pero, qué más da si no los volveremos a ver, la magnificencia con la que está creado el mundo de los sueños se siente real, creíble y tan increíble como en nuestros sueños.
Su elenco en particular es uniformemente excelente así como los responsables de toda la polémica que hubo en redes sociales antes de su estreno, Tom Sturridge, Boyd Holbrook, Jenna Coleman, Gwendoline Christie, Kirby Howell-Baptiste, Patton Oswalt, Vivienne Acheampong. Mark Hamill y David Thewlis entre otros, todos son particularmente maravillosos como personajes y es bueno que fueran elegidos para mostrar mucha más diversidad que la que se presentó en los cómics.
La partitura musical compuesta por David Buckley (Greenland) se mantiene discreta y se hace presente como un marco ágil y elegante para su historia, por ser una serie no cae en lo repetitivo pero tampoco en lo asombroso.
En conclusión, The Sandman funciona muy bien en este formato y rinde un merecido homenaje a su material base su concepto audiovisual merece ser apreciado y valorado en su propio contexto y belleza como lo que es, una gran serie televisiva que esperemos siga adelante contándonos más de estas maravillosas historias.
The Sandman ya se encuentra disponible en la plataforma de Netflix.
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