Las producciones cinematográficas de Warner Animation han gozado de popularidad los últimos años, sus adaptaciones así como sus producciones originales han sido del gusto de propios y extraños planteando y replanteando una vez más que estos superhéroes aún tienen mucho por contar.
Bien sabemos que Warner Bros Studios no está en su mejor momento, las pérdidas millonarias que han tenido la han puesto en el ojo del huracán siendo el principal rumor de que será Universal Studios la que se encargue de comprarlos. Desde la llegada de James Gunn y Peter Safran a DC Studios es para despejar dudas, aclarar las cosas y poner sobre la mesa las verdades que hay tras las películas de superhéroes de DC, sin tener un panorama y una dirección claras de a dónde quieren llevar estas historias ni en el campo de las producciones en live action así como en las animadas.
En una reciente entrevista los productores Jim Krieg, Jeff Wamester y Butch Lekic, confirmaron que desde los estudios de Warner Bros. Pictures presidido por Gunn se impidió el desarrollo de al menos una película animada, esa película de animación era nada más y nada menos que Kingdom Come, historia que tiene lugar en una realidad alternativa y se centra en una nueva generación de superhéroes que toman el relevo después de que los héroes clásicos se retiren, la cuestión aquí es que estos héroes novatos no defienden los mismos valores de honor y justicia que la generación antigua, lo que conduce a un futuro no tan bueno ni tan brillante como creían.
En lugar de esto los estudios de animación presentan en este 2023 Justice League: Warworld adaptación basada en las publicaciones de DC Comics en marzo de 2021, una miniserie coescrita por Phillip Kennedy Johnson y Grant Morrison con ilustraciones de Sami Basri, Adriana Melo y Miguel Mendoza.
¿De qué va la película?
la Liga de la Justicia ha sido una asociación informal de seres super poderosos que salvan al mundo de grandes y peligrosas amenazas, cuando sus principales héroes Batman (Jensen Ackles), Superman (Darren Criss) y Wonder Woman (Stana Katic) se encuentran atrapados en realidades alternativas después de ser tomados como rehenes por Mongul (Robin Atkin Downes) siendo arrastrados a Warworld un lugar de interminables y brutales combates entre gladiadores, para poder escapar deberán unirse para formar un equipo imbatible capaz de llevar a todo un planeta a la libertad.
Las adaptaciones de este universo cinematográfico animado van desde historias buenas que dejan a propios y extraños satisfechos a muy regulares que solo están por cumplir la regla básica que es entretener, es de reconocer que en cada una de ellas hemos visto una evolución en la manera en la que se cuentan estas historias, si bien algunas son versiones muy libres otras respetan su material base.
Justice League: Warworld es el trabajo más reciente de una serie de películas originales animadas de DC Universe que empezara con Superman: Doomsday en el 2007, mucho ha pasado y mucho hemos visto, ahora en esta nueva etapa los héroes más icónicos se reinventan para ser más de un público juvenil/adulto que para niños, abordando temas más complejos y una acción más violenta y más explícita.
La película se enfoca en los miembros del equipo de la Liga de la Justicia, Batman, Superman y Wonder Woman quienes son secuestrados y llevados a Warworld, un lugar de interminables y brutales combates entre los mejores gladiadores del universo, sin recordar cómo llegaron allí cada uno tiene una visión mental de un mundo alterno y teniendo vagos recuerdos de su verdadera personalidad.
La trama se divide en un principio en tres cortos distintos, en la primera historia vemos a Wonder Woman en el viejo oeste donde se enfrenta a Jonah Hex y varios forajidos en una búsqueda para salvar a la gente de un pequeño pueblo, la acción que tiene lugar a lo largo de este segmento ciertamente nos presenta algo completamente diferente a lo que habíamos visto antes, la acción y la violencia son sumamente explícitos y no se toma restricciones al mostrarlo.
El siguiente corto es una historia de Batman que es transportado a la era barbárica dinosaurios, más que parecer el caballero nocturno toma la clara referencia a Conan el Bárbaro pero sin dejar a un lado su esencia de detective al momento de enfrentar a Deimos (Damian O’Hare) vemos también una versión alterna de Wonder Woman, Aquaman y Mera.
Por último vemos en un hermoso blanco y negro a Superman transportado a un mundo ambientado dentro del clásico género del cine negro de los años 20. Junto al agente especial Faraday (Frank Grillo) Clark Kent, recibe un mensaje sobre la llegada de un visitante extraterrestre a la tierra con planes para destruir el mundo entero.
Después de una serie de eventos desafortunados en donde los asistentes en una cafetería que son supuestos testigos del accidente de la nave extraterrestre se revelan como los seres que quieren conquistar y dominar el mundo hace que Clark, Diana y Bruce se reunan en este mundo para tratar de detenerlos recordando cosas que no saben como las aprendieron, se este cine negro vuelve a ser de color en donde vemos que Martian Manhunter (Ike Amadi) ha sido sometido y conectado a una máquina que lo obliga a crear ilusiones telepáticas en prisioneros dándoles el miedo y el odio necesario para darle energía a Warworld.
Es aquí donde entendemos cuál es el giro de tuerca en esta historia, como espectadores entendemos perfectamente bien que todo lo anterior fue creado por Hunter para reunir a estos héroes y ayudarlos a escapar y a liberar a todos de este mundo en eterna guerra creada por Mongul (Robin Atkin Downes) con ayuda de Lobo (John DiMaggio) quien intenta traicionarlo para quedarse con ese mundo, el final es poco predecible, tras detenerlos se revela que todo esto ha sido solo el comienzo, que lo peor aún está por venir.
Su conclusión es dolorosamente apresurada y confusa para una película qué, por lo demás, ha hecho un gran trabajo al arriesgarse a salir de lo convencional, es frustrante saber que todo está preparado para ser concluído más adelante, Justice League: Warworld no se anuncia como una primera parte ni tampoco se ha dicho en qué continuará, el cliffhanger llega tan de repente que como espectador no lo vemos venir y esto se debe a que la trama está tan bien estructurada que en ningun momento las sub tramas entorpecen su narrativa, por el contrario, nos mantiene atentos a la acción y a querer saber en qué terminará todo.
Desde este el reinicio de este universo animado llamado Tomorrowverse que comenzó en el 2020 con Superman: Man of Tomorrow y siguió con Batman: Soul of the Dragon, Justice Society: World War II, Batman: The Long Halloween (Parte 1 y 2), Injustice, Catwoman: Hunted, Green Lantern: Beware My Power, Constantine: House of Mystery, Batman and Superman: Battle of the Super Sons, Legión de Superhéroes y Batman: The Doom That Came to Gotham, el estilo artístico en la animación ha variado ha ido desde lo clásico hasta lo ánime pasando por el CGI, aquí esto se mantiene dentro de la línea tradicional con colores brillantes y un mayor énfasis en los contornos oscuros y profundos, atenuados y luego exagerados según lo que se nos está contando.
La película se presenta como una antología muy al estilo Elseworlds que funcionaría muy bien si fueran largometrajes de cada uno de estos personajes, en realidad es mucho más compleja de lo que pudieramos esperar, su estructura narrativa hace que todas las sub tramas lleguen a un gran final, el guión escrito por Jeremy Adams, Ernie Altbacker y Josie Campbell no es del todo simétrico y quizá esto sea lo que funciona tan bien en este trabajo.
El gran fallo que tiene es qué se esfuerza demasiado en tener una propia personalidad más adulta, los segmentos iniciales aunque entretenidos se sienten inconexos lo que dificulta entender por completo hacia dónde va la historia, su falta de continuidad que sabemos que está hecha así deliberadamente no logra tener el impacto necesario en algunas escenas, su falta de continuidad e información en un formato que pretende ser de antología es que no todas las historias se crean y se cuentan de la misma manera, en este caso es la historia intermedia que se siente demasiado segura en todo momento a diferencia de los otros dos universos que se sienten más como un prólogo que abre algo más grande que aún no sucede.
El punto a favor que tienen los personajes centrales de la película está en la exploración de sus motivaciones y personalidades que aporta una profundidad que los hace más vulnerables, más humanos, cada uno tiene su tiempo y momento en este escenario fantástico, desarrollando con ello rasgos únicos y personalidades diferentes a las que ya conocemos con peculiaridades que los hacen sentir más humanos, algo que como audiencia podemos percibir e involucrarnos.
Su director Jeff Wamester está familiarizado con el género, ha trabajado en películas y series animadas para Marvel y DC, lo que aquí nos presenta bien pidría ser un trabajo que se cuente por separado dándonos un antes, un durante y un después de lo que estamos viendo, no cae en zonas de confort no se apega al típico discurso moral e inclusivo por el contrario, lo que hace es tan diferente que ha conseguido la calificación R y se debe al hecho de su violencia explícita así como a su lenguaje adulto, esto se aleja por completo de todo lo anterior que hemos visto y se agradece que un proyecto así esté más dirigido al publico adolecente y adulto.
El cast de voces cuenta con Jensen Ackles, Darren Criss, Stana Katic, Ike Amadi, Robin Atkin Downes, John DiMaggio, Roger Cross, Damian O’Hare, Rachel Kimsley, Troy Baker y Frank Grillo que hacen un estupendo trabajo en equipo, pudiéramos decir que es fácil para ellos encarnar a este tipo de personajes pero es exactamente todo lo contrario.
La música compuesta por Michael Gatt es buena sin llegar a ser destacado, aún faltan pulir piezas que definan la personalidad de cada uno de ellos, no hay un tema específico central del que se deriven variantes reconocibles para Batman, Superman y Wonder Woman, cumple con solamente estar presente.
En resumen y a pesar de lo creativo que puede ser, Justice League: Warworld se queda muy corta con su primicia y adaptación, deja atrás demasiadas oportunidades que bien pudieron ser aprovechadas a beneficio de la misma, lo complicada que puede llegar a ser se diluye con su final y queda en ser solo entretenida, vistosa pero con muy poca sustancia.
Justice League: Warworld ya se encuentra disponible en formatos caseros.
