Es innegable que hay una crisis muy seria en lo que al entretenimiento se refiere, ya sea en cine o televisión las cosas no han ido tan bien como los estudios esperaban desde hace ya unos años, y esto no es derivado de la pandemia de SARS-CoV-2 y sus variantes, ni tampoco por la huelga de actores y escritores, se debe principalmente a la falta de ideas originales.
En marzo de 2022 llegó a las salas cinematográficas lo que pretendía ser un nuevo inicio y un nuevo universo compartido en Batman creado por Matt Reeves, dando un giro a todo lo que habíamos visto antes y dejando ya de lado al Batman de Ben Affleck perteneciente al SnyderVerse, una historia que narra los acontecimientos durante su segundo año luchando contra el crimen y la corrupción en Gotham City además de enfrentarse al asesino serial llamado The Riddler.
Pese a toda la polémica que tuvo la cinta fue bien recibida por propios y extraños, una novela que servía a su vez como precuela de la cinta llamada Before the Batman: An Original Movie Novel y escrita por David Lewman que plantea su origen así como su enemistad con un huérfano llamado Edward Nashton que años después se convertiría en The Riddler, una historia que nos ubicaba más concretamente en el inicio de este universo.
Así mismo también se presentó una miniserie de 6 números en cómic escrito por Paul Dano y dibujado por Stevan Subic llamado The Riddler: Year One, esta historia es una continuación directa de Before the Batman: An Original Movie Novel y narra la tortuosa vida de Nashton hasta convertirse en un asesino serial.
Luego del estreno de la cinta hace 2 años ahora se habla ya de una segunda entrega y 2 series de televisión, una basada en la policía de Gotham y que sería una precuela de la película y de la novela mostrando el primer año de Batman desde la perspectiva del cuerpo policial corrupto de Gotham City proyecto que finalmente terminó siendo cancelado y la otra serie basada en el personaje de The Penguin y sus nexos con la mafia, detallando el ascenso al poder en el inframundo criminal de Gotham después de los eventos de la película y que sirviera como punto de enlace con la tentativa The Batman 2.
Con el cambio de CEO en Warner Bros las cosas también cambiaron, Gunn y Safran fueron contratados para dirigir la recién formada DC Studios en noviembre de 2022 después de trabajar en varios proyectos del DCEU incluyendo la película The Suicide Squad (2021) y su serie spin-off Peacemaker (2022), este par decidió dejar a un lado todos los proyectos que Walter Hamada tenía previstos para su desarrollo y empezar su propio universo desde cero y del cuál no hemos visto mucho.
Finalmente y luego de muchos tropiezos en este 2024 se estrena The Penguin, miniserie spin off de 8 episodios en la que veremos un desarrollo más concreto del personaje y sus motivaciones para ser el jefe supremo de la mafia en Gotham City y consolidarse como villano de Batman.
¿De qué trata la serie de El Pingüino?
Ambientada una semana después de los eventos de la película The Batman (2022) la historia nos narra el ascenso al poder de Oswald “Oz” Cobb alias Penguin (Collin Farrell) en el inframundo criminal de Ciudad Gótica.
Nuevamente vemos que una serie basada en los personajes de Batman pero sin Batman puede no ser una buena idea, ya vimos el fracaso que fue Gotham al querer imitar lo hecho en Smallville (2001-2010) un trabajo infructuoso que dejó mucho que desear en cuanto a su narrativa y cronología de eventos teniendo serias y muy marcadas inconsistencias en el universo de Batman en general, The Penguin (el rata alada) como serie pretende ser un material aparte en donde conozcamos más sobre el inframundo corrupto de Gotham City y la relación que tienen las mafias y como operan en sus territorios.
Series como Birds of Prey (2002), Pennyworth: The Origin of Batman’s Butler (2019) y más recientemente Gotham Knights (2023) dejaron una muy neutra y escueta impresión en el gusto de propios y extraños, la actual visión que tiene Lauren LeFranc como creador de este mafioso criminal se eleva, o más bien se tambalea pretendiendo que esto sea una épica historia entre pandillas y mafiosos poderosos a partir de sus orígenes en el cómic y que si bien está lejos de superarlo al menos queda en igualdad de condiciones.
The Penguin como serie es una adaptación de la sucia, oscura y aburrida versión de Matt Reeves tomando como base e inspiración la cinta Se7en de David Fincher (1995) para su The Batman, este primer episodio retoma inmediatamente los acontecimientos sucedidos al final película, después de que The Riddler de Paul Dano hiciera estallar el muro marino que protegía Ciudad Gótica e inundara la mayoría de los barrios más pobres, una oportunidad para que todos los poderosos se hicieran de un lugar en la política o en la mafia, mediocre mafioso de nivel medio Oswald “Oz” Cobb ve una irrepetible manera de llegar a la cima en medio de todo este caos, enfrentar al lisiado Falcone (Mark Strong) y Maroni (Clancy Brown) que está encerrado en la penitenciaría de Blackgate, su idea es enfrentar a estas familias para que se aniquilen entre ellas y así quedarse con todo el dominio.
Una historia que ya hemos visto contada muchas veces con resultados que van desde ser muy buenos a casos realmente lamentables, lo que se pretende aquí es explorar y escudriñar a detalle la vida de este personaje, las mayores virtudes de Oz son su facilidad de palabra, su ingenio, su habilidad camaleónica para hacerse de respeto y seguir vivo y esto va de la mano de sus debilidades que incluyen un resentimiento por aquellos que en su infancia lo maltrataron, humillaron y se burlaron de su aspecto físico lo que lo incita a la violencia.
En los primeros minutos podemos ver que esa impulsividad e inseguridad lo meten en un grave problema, un insulto directo del heredero de Falcone, Albert (Michael Zegen) incita a Oz a sacar su arma y dispararle a quemarropa y matándolo al instante y tendrá que arreglar las cosas para permanecer vivo por lo que maquila un plan para hacerles creer a todos que fue la familia Maroni la responsable de este crimen y que Oz quede libre de toda sospecha.
Hay un constante estira y afloja entre las ambiciones e inseguridades de Oz que es lo que veremos a lo largo de sus ocho episodios lo que de alguna manera logra que esta épica criminal de bajo nivel se perfile para ser más completa ante la ausencia de Batman, mismo que solo es mencionado muy brevemente en un noticiero que informa sobre el estado actual de la ciudad y al menos en este episodio ya no se vuelve a hacer referencia a su intervención, LeFranc junto con el director Craig Zobel van construyendo lentamente un drama criminal que se intensifica rápidamente y que imita desesperadamente a la serie creada por David Chase The Sopranos (1999).
Es inevitable no hacer las comparaciones propias entre una y otra, la estructura de The Penguin está basada descaradamente en esta otra multipremiada serie, es dificil poder crear una historia original cuando esta tiene un personaje secundario de un personaje sumamente importante en la cultura pop y que myt recientemente acaba de cumplir 85 años de estar vigente en el medio del entretenimiento y merchandising.
El episodio que actualmente está disponible es:
1. After Hours.
Una semana después del asesinato de Carmine Falcone (Mark Strong) y la destrucción de la bahia de Gotham City, Alberto Falcone (Michael Zegen) hijo de Carmine y heredero aparente de todo su imperio criminal atrapa a Oswald “Oz” Cobb (Collin Farrel) mientras recupera los objetos de valor de Falcone del Iceberg Lounge enytre ellos un folder con información confidencial de los actuales pol´piticos de la ciudad, Oz escucha mientras Alberto explica sus planes para revolucionar la operación de drogas de Falcone, cuando Oz le expresa sus aspiraciones de ser un mafioso poderoso y respetado Alberto se burla de él, lo que lleva a Oz a dispararle y matarlo impulsivamente.
Oz intenta deshacerse del cuerpo de y auyenta a un grupo de delincuentes juveniles que están robando las llantas de su automóvil, atrapa y recluta a uno de ellos, Victor “Vic” Aguilar (Rhenzy Feliz) para que se ahora su chofer y lo ayude, Oz se entera de que los Falcone planean asumir el control de su red de drogas, más tarde se encuentra con la hermana de Alberto, Sofia Falcone (Cristin Milioti) recién liberada del Arkham Asylum, Oz planea irse de la ciudad para mantenerse con vida pero cambia de opinión después de ser alentado por su madre Francis a que debe luchar por hacerse de lo que le corresponde y tener poder sobre todo y sobre todos, Oz visita al rival de Falcone, Salvatore Maroni (Clancy Brown) en la prisión de Blackgate y le ofrece devolver el control de la operación de tráfico de drogas, Maroni se muestra reacio y desconfía despues de que antes lo traicionó pero lo reconsidera después de que Oz le devuelva un anillo que Carmine le había quitado a Maroni y que Alberto usaba, más tarde Sofía captura y tortura a Oz pero se distrae de matarlo con la repentina recuperación del cuerpo de Alberto organizada por Víctor bajo las ordenes de Oz para implicar a la familia de Maroni, Oz es liberado y comienza a conspirar con Víctor para tomar el control de la familia criminal Falcone.
Un episodio que logra enganchar desde un inicio y que no aburre ni demerita el trabajo narrativo que están haciendo, tratan a este personaje de una manera más realista siguiendo con la línea noir y oscura de la cinta de Reeves, la pregunta que cabe hacernos ahora es ¿ por qué es tan necesario darles un realismo absurdo a personajes fantásticos? pareciera que esa ha sido la tendencia de este género desde la trilogía de Batman hecha por Christopher Nolan (2005-2012) pocos son los que lo han hecho bien pero recordemos que estos universos son más fantásticos que realistas.
A lo largo de este episodio The Penguin no nos está ofreciendo nada nuevo, oscila entre lo grotesco y lo realista en un drama criminal lleno de estereotipos y clichés de mafiosos caricaturescos y personajes exagerados con elaborados intereses personales, establece que Oz y Sofía pelearán por el poder y el control de la ciudad, ambos intentan con frustración luchar contra la sociedad y contra ellos mismos hasta matarse entre sí, sólo hay un lugar para uno de ellos, una historia que pretende ser audaz y que se desarrolla en el contexto de Gotham City y el universo de Batman pero, sin Batman, y esta serie quiere demostrar que no se necesita de su presencia para poder contarla.
Nada que decir sobre el maquillaje, Farrell vuelve a ponerse el traje botarga y las prótesis faciales que lo transforman en un hombre completamente diferente, un gran trabajo lo mismo que el vestuario que sí evoca a aque esto es una secuela de lo que sucede en la cinta de 2022, cada detalle ha sido cuidado minuciosamente para que todo luzca y se vea igual o lo más parecido a lo que ya vimos enfatizando más en su paleta de colores para recrear las atmósferas oscuras y siniestras y otra más ligera para los exteriores en las escenas diurnas.
Las referencias que tiene sobre lo que ya conocemos del personaje son muy sutiles pero a la vez directas, Oz usando un paraguas como en su versión de las viñetas, la joyería llamada Burgess en clara referencia al actor Burgess Meredith quien interpretó a The Penguin en la serie de televisión de Batman de los años 60, Alberto Falcone en la serie de cómics de Batman: Long Halloween es el asesino Holiday Killer, la clara mención al Arkham Asylum, las claras referencias al inicio sobre el final de la película de The Batman, mismas que si bien son agradables no son lo suficientemente importantes en este universo, un descarado fanservice para mantener la atención.
El elenco lo conforman Colin Farrell, Cristin Milioti, Rhenzy Feliz, Deirdre O’Connell, Clancy Brown, Carmen Ejogo, Michael Zegen, Berto Colón, James Madio, Joshua Bitton, David H. Holmes, Daniel J. Watts, Ben Cook, Jayme Lawson, Michael Kelly y Mark Strong, es impresionante lo que estos actores hacen con sus personajes, hacen que algo que podría ser ridículo tome un tono más serio y convincente.
La banda sonora es compuesta por Mick Giacchino hijo de Michael Giacchino sigue los pasos de su padre con una música con su propia personalidad, más evocada al cine noir y de mafiosos de la década de los 40, un buen trabajo que acompaña perfectamente bien a todas y cada una de las escenas, una mezcla de influencias modernas con estructuras orquestales tradicionales, pero con su toque personal. las canciones que se utilizaron de fondo son Put the Blame On Me de Rita Hayworth, The Promise de When In Rome y para el cierre del episodio 9 To 5 de Dolly Parton, cada una con una clara referencia a sus letras y a la situación en ese momento.
En resumen, The Penguin como serie llega en un momento en el que ya casi a nadie le importa lo que suceda o no con la secuela de The Batman, un trabajo que tardó demasiado en estrenarse y que ahora nos sabe a completamente innecesario pero que ha dado una grata sorpresa, la vida y obra de uno de los villanos más icónicos y reconocibles en los cómics que pasará como algo más que se hizo de Batman sin Batman y que podría funcionar en su propio contexto.
The Penguin ya está disponible en la plataforma Max.
