La década de los 60 fue muy prolífica para las series de televisión, muy variados temas que eran y siguen siendo del gusto de propios y extraños, las historias iban desde gangsters, soldados en la guerra, agentes secretos, submarinos, mundos alternos, viajes en el tiempo y por supuesto la exploración espacial.
Irwin Allen creó varios de estos conceptos, Time Tunnel, Land of the Giants, Voyage to the Bottom of the Sea y Lost in Space, series que discretamente estaban conectadas entre sí, siendo los años 60 veían un futuro prometedor en los años 80 y 90 en donde todo era posible, como creador hizo un gran aporte al género de ciencia ficción que perdura hasta nuestros días.
La idea de enfrentarse a peligros inminentes en el espacio, en el océano o en otra dimensión era lo que daba vida a estos seriales que tenían capítulos autoconclusivos y del que algunos tuvieron un final antes de ser canceladas, otras más terminaron su ciclo en novelas y cómics.
Una de sus series más populares creadas y producidas para 20th Century Fox Televisión fue Lost in Space que pretendía tener un spin off llamada, Man From The 25th Century que se presentó en un cortometraje que no tuvo éxito, la serie se basa en la popular novela The Swiss Family Robinson del autor suizo Johann David Wyss y publicada en 1812, trata sobre una familia suiza de inmigrantes cuyo barco se dirige a Port Jackson en Australia y su barco naufraga tras una tormenta en las Indias Orientales.
La serie original contó con un cast en el que participaban Guy Williams, June Lockhart, Mark Goddard, Marta Kristen, Bill Mumy, Angela Cartwright, Bob May, Dick Tufeld y Jonathan Harris quienes encarnaban a esta familia que vivía aventuras y desventuras en el espacio tratando de regresar a casa,
Material que ha tenido varias y diversas adaptaciones en cine como en televisión siendo la más popular el ánime The Swiss Family Robinson: Flone of the Mysterious Island de 1981, llevar este mismo concepto con los mismos personajes a otro entorno fue un gran reto, las aventuras de esta familia ya no serían en una lejana isla sino en el espacio muy lejos del planeta tierra.
Años más tarde y durante casi el final de la década de los 80, la idea de llevar a la pantalla grande estas series a manera de sagas fue del interés de varios estudios, Paramount Pictures hizo lo propio con The Saint (1998) con Val Kilmer en el rol principal, Warner Bros Studios se encargaron The Avengers (1998) con Ralph Fiennes, Uma Thurman y Sean Connery mientras que New Line Cinema presentaba Lost in Space (1998).
La serie de televisión se inspiró más libremente en la novela sobre una familia que naufraga lejos de casa y que debe utilizar su ingenio para sobrevivir a situaciones adversas a las que no están acostumbrados para vivir fabricando herramientas, máquinas y construir un hogar hasta que son rescatados y vuelven a la civilización con nuevos conocimientos y una nueva forma de ver las cosas.
El plot que tiene la novela bien se puede adaptar no sólo a sí misma sino a otros entornos en este caso una nave espacial que hace las veces de la isla y el espacio exterior como un vasto mar en el que naufragan, esto también da la posibilidad de reestructurar a los personajes, darles un estilo diferente y otra personalidad, esto permite que la historia pueda fluir mejor dentro de su propio contexto.
Como película no se preocupa por entrar en más detalles para ubicarnos en lo que vamos a ver, después de una batalla espacial en su apertura que nos muestra que en este futuro el espacio ya ha sido explorado, si bien no en su mayoría las naves espaciales ya son un vehículo común, una rápida explicación de por qué y cómo es que esta nueva familia Robinson inician un viaje misión hacia un planeta llamado Alpha Prime, la ,mayor parte se desarrolla principalmente a bordo de su nave el icónico Jupiter One en donde tienen un polizón inesperado que intenta sabotearlos el Dr. Zachary Smith.
La misión básicamente es para comenzar una migración a gran escala desde una Tierra que pronto será inhabitable, con un saboteo fallido inician su viaje que tendrá batallas, enfrentamientos, luchas, ataques, viajes hiperespaciales, viajes en el tiempo conociendo otros planetas, al usar su hiperpropulsor para evitar chocar con el sol esto los envía a una parte muy lejana de la galaxia l la mayor de sus aventuras será completar su misión y colonizar un nuevo planeta.
El guión escrito por Akiva Goldsman quien es responsable de los fracasos de cintas como Batman Forever (1995) y Batman & Robin (1997) pero esto es efímero para un proyecto como este requiere de originalidad e inteligencia, eso aquí sucede de forma parcial, es evidente que Goldsman solo reescribe lo que ha visto en el cine y en la serie de televisión, elementos de suspenso como en Alien (1979), aventuras espaciales y peleas con naves al estilo Star Wars (1977) y un humor muy ligero típico de las comedias ochenteras. La historia es muy simple de entender aborda un problema del que mucho se ha hablado que es el calentamiento global y la escasez de recursos naturales, la tierra está agonizando y no sobrevivirá más allá de dos décadas, el planeta Alpha Prime es el único que cuenta con las condiciones propicias habitables para una colonización que pueda salvar a la humanidad, lo que cuestiona que en unos miles de años ese planeta volverá a estar agonizante e inhabitable mientras los humanos no entiendan que deben hacer un cambio en su estructura.
En el año 2058 el profesor John Robinson (William Hurt) y su familia han sido los elegidos para una misión de investigación siendo los primeros colonos, el siguiente paso es construir una hiperpuerta que pueda evacuar el planeta, este viaje implica que estén años en animación suspendida mientras que la nave automáticamente siga su curso y les proporcione lo que necesitan para sobrevivir, un arco tecnológico que conecte ambos extremos es necesario para que los seres humanos puedan soportar el cambio, esto tiene sus riesgos porque si no saben usar la tecnología con la que cuentan entonces no sabrán a dónde podrá llevarlos el hiperpropulsor algo que está implícito que descubrirán los Robinson.
La tripulación colona tiene a Maureen (Mimi Rogers) esposa de Robinson, su hija científica Judy Robinson (Heather Graham), su hija menor Penny (Lacey Chabert) y su hijo Will (Jack Johnson) quien a su corta edad es el cerebro del equipo, la nave está pilotada por el cadete y ahora capitán espacial Don West (Matt LeBlanc) y acechando los planes de la misión está el malvado Dr. Zachary Smith (Gary Oldman),que quiere sabotear la misión, pero queda atrapado a bordo cuando la nave despega.
Para salvarse de estrellarse Don West tiene la idea de usar el hiperimpulsor para atravesar el sol, una estrategia muy pendeja pero necesaria para seguir desarrollando la historia, la consecuencia de hacerlo los salva pero los lleva a una galaxia muy, muy, muy pero muy lejana, la película se va transformando en un drama ligero con aventura con situaciones de comedia, un robot rebelde, un planeta en explosión, arañas espaciales mecánicas, un romance y problemas familiares que involucran la confianza y autoridad.
El director Stephen Hopkins y su director de fotografía Peter Levy crean todo un universo en donde estas aventuras pueden llevarse a cabo pero que también deje la puerta abierta para posibles secuelas y hacer de esto una saga cinematográfica que como bien sabemos no sucedió, Lost in Space fue la apuesta de New Line Cinema para entrar en la franquicia de películas espaciales y a largo plazo competir con el universo de Star Trek de Paramount.
Es de reconocer que si en su estreno no tuvo el éxito que se esperaba ha sucedido que con el pasó de los años se ha vuelto más amable sin llegar a ser de culto, los efectos especiales son novedosos para su momento, pudimos ver una versión completamente diferente sobre las aventuras espaciales, quizá este sea su mayor aporte al género y lo que ha hecho que en más de dos décadas siga siendo un buen entretenimiento familiar.
Si vemos las cosas a distancia mucho ha pasado desde entonces, como audiencia nos hemos vuelto más selectivos y exigentes con el material audiovisual que consumimos, si comparamos lo hecho aquí con producciones recientes entonces llegamos a concluir que la cinta ha resistido más que bien el paso del tiempo, que para cuando fue estrenada y tras su inminente fracaso nadie pensó que este proyecto estaba fuera de su tiempo algo que hoy en día podemos apreciar más no cayendo en abogar por la nostalgia sino porque su historia, efectos especiales y la música formaron una muy buena combinación de elementos que hace de esto una aventura que bien podría estar a la altura de lo que Hollywood como industria del entretenimiento está haciendo.
Uno de los problemas que tiene es que su narrativa a momentos es sumamente lenta se toma más de 30 minutos en entrar en contexto, el resto de la película se divide en dos partes: en la primera vemos la investigación de una nave espacial aparentemente desierta y la segunda de la exploración de un planeta inhóspito que implica un viaje temporal, la conclusión es muy adivinable, se salvan y siguen su recorrido para encontrar el camino al que será su nuevo hogar.
Tiene muy buenas secuencias de acción y uno de sus mayores atractivos como lo fue en la serie clásica es el Robot que aquí es un animatrónico hecho por Jim Henson’s Creature Shop que le da un toque más moderno y futurista, lo que nos pone como espectadores en esta cinta sin que con eso tengamos que hacer comparaciones a un programa que fue estrenado dos décadas antes, estamos ante un producto nuevo para su tiempo, uno que tiene y ha tenido su propia personalidad.
Los personajes están bien definidos y concretan pero sus arcos e historias independientes son simples y hasta débiles, si bien cada uno tiene su propio tiempo en pantalla es Oldman quién se lleva la atención de todos, y no porque imite o trate de sobreactuar a un villano es simplemente porque su experiencia en el medio le ha permitido poder desarrollar diferentes facetas en su actuación, aquí lo vemos como un villano que no es tan caricaturesco como en la serie, es más bien meticuloso y detallista sin dejar de tener un humor muy sarcástico.
William Hurt interpreta al profesor John Robinson, un científico e ingeniero con la experiencia suficiente para crear y construir una nave que pueda ser autosustentable y recorra largas distancias más rápido que la velocidad de la luz.
Mimi Rogers es Maureen Robinson, su “encantadora” esposa, este es uno de los pocos personajes que trabaja de manera independiente en esta película, es solidaria, comprensiva y cariñosa pero es un reflejo de cómo eran las mujeres en la década de los 50 y 60.
Heather Graham es Judy Robinson la hija inteligente que trabaja junto a su padre en la nave espacial y que busca hacerse de su propio lugar como científica, Lacey Chabert es Penny Robinson la típica adolescente rebelde e inconforme por todo, la que no aporta pero como se queja y Jack Johnson Es Will Robinson un pequeño genio científico que puede crear y desarrollar elementos tan buenos o quizá mejores que los de su padre.
Matt LeBlanc es el Mayor Don West, un prometedor piloto militar que de repente ve truncada su ascendente carrera para formar parte de una arriesgada misión junto con la familia Robinson, como actor a veces se pierde y muy pocas veces sorprende en un papel que no estaba destinado a ser y que simplemente requería una cara bonita o de un galancillo de moda.
El soundtrack se divide en 2 elementos, por un lado tenemos la música electrónica, el tema principal re-compuesto e interpretado por el grupo Apollo 440 de lo hecho por John Williams para la serie es perfecto para el concepto que se está manejando, otros que participan son es Juno Reactor, The Crystal Method, Propellerhead, Fatboy Slim, Death in Vegas y Space, por otro lado tenemos el score compuesto por Bruce Broughton que tiene piezas en las que luce sus referencias a la serie de televisión y a la música de los compositores Hans J. Salter, Herman Stein, Richard LaSalle, un trabajo impecable que está a la altura de lo que se pretende.
El merchandising contó con toda una línea de figuras que incuía naves espaciales y a los personajes, junto con esta también estuvo a la venta una sub línea que correspondía al programa de televisión por parte de la compañía Trendmasters.
Los formatos caseros fueron la cinta en VHS, Laser Disc, DVD y Bluray, la edición especial de este último incluía un libro de la película y el Jupiter One que se vendió solamente en Japón.
A 25 años de su estreno Lost in Space sigue siendo una película incomprendida que tardó mucho en ver su éxito, una película que sale de su tiempo para ubicarse en los estándares más modernos que manejamos hoy en día, un trabajo digno, sencillo y que entretiene pero sobre todo que cumple con sus propias reglas impuestas y aporta algo nuevo al género.
Lost in Space se encuentra disponible en diversos formatos caseros y para venta/renta en Prime Video.
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