El intento desesperado que tiene Warner Bros Pictures por revivir un universo que el mismo estudio se encargó de matar poco a poco y que aún quiere seguir en la contienda contra el MCU toman lo poco que tienen para seguir vigentes.
Por un lado están todas las noticias al rededor de la cinta de Matt Reeves y lo que quiere hacer con The Batman, los planes para hacer Shazam 2 y Aquaman 2, está pendiente el estreno de WW 84, y finalmente tenemos el estreno de la película de Birds of Prey and the Fantabulous Emancipation of One Harley Quinn
La loca y desquiciada criminal de Gotham City intenta dejar atrás al Joker de Jared Letto pero muy principalmente a todo lo sucedido en Suicide Squad con un giro completamente nuevo y renovado teniendo mucho humor negro y acción que ya todos esperábamos.
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¿De que va la película?
La insana Harley Quinn (Margot Robbie) pretende tomar el control de su vida una vez que ha decidido dejar de ser la “novia tóxica” del Joker pero lo que ella no esperaba era volverse el blanco de una laaaaaarga lista de personas en Gotham City que la quieren muerta, esto por supuesto incluye al mafioso Roman Sionis (Ewan McGregor) alias Black Mask, para poder sobrevivir a lo que parece ser una masacre nuestra protagonista deberá formar una extraña y dispareja alianza con la Detective Renee Montoya (Rosie Perez), la cantante Dinah Lance (Jurnee Smollett Bell) Black Canary y la misteriosa Helena Bertinelli (Mary Elizabeth Winsted) Huntress pero, ¿serán ellas lo suficientemente astutas para detener todo lo que se les avecina?
Margot Robbie y la directora Cathy Yan se aventuran en éste proyecto con muy pocas ganas y eso se nota desde antes del estreno con la desencantada publicidad y los discretos trailers que presentaron y aunque logran dar una nueva versión del personaje que sea más congruente con lo que pasa en los cómics y su serie de televisión, se quedan muy cortas en lo que a hacer una película entretenida y bien realizada se refiere, intentan a cada momento de justificar cada una de las acciones de un guión bastante pobre del cuál pudieron sacar mucho más de sus actores y plantearlo todo de una manera muy diferente y no tan cumplidora, la cinta se preocupa más por explotar la absurda locura de su personaje central y generar con esto más humor negro del necesario combinándolo con escenas de acción muy bien coreografiadas pero muy poco destacadas en donde las secuencias que no dependen de tantos cortes de edición para pretender que lo que estamos viendo es algo espectacular.
El guión de Christina Hodson de igual forma pretende a ratos aplicar la frase de a una acción, una reacción de lo sucedido en una película anterior que tratas de olvidar lo cuál hace que todo ésto sea presentado en una forma no lineal para que por ahí de paso se reafirme la personalidad de su villana/protagonista en un un enredo que más que ayudar a la cinta la entorpece su misma narrativa en vez de usarlo a su favor y que sea una historia sencilla y muy directa.
En lo que respecta a las actuaciones no podíamos esperar mucho ya que hacen lo que pueden con lo que tienen y se esfuerzan por hacerlo más notable a lo que vimos previamente en Suicide Squad y si bien se ve apoyada de manera sólida con sus compañeras femeninas (incluyendo a la joven Ella Jay Basco como Cassandra Cain), sin dar lugar a la menor de las dudas quién termina destacando del todo en la cinta es Ewan McGregor en su interpretación de un excéntrico Roman Sionis y un Black Mask muy desaprovechado pero que disfrutamos mucho de verlo a cuadro.
Por otro lado, la música también intenta dar su mejor esfuerzo al tratar de convertirse en un elemento importante, la combinación de canciones con el poco destacado score de Daniel Pemberton no logran darle una personalidad propia y simétrica a lo que estamos viendo, además opta por el tema You Don’t Own Me original de Leslie Gore en una versión más a doc con la cinta y que intenta iconizar a la protagonista como una mujer empoderada e independiente que pese a su locura puede sobresalir por si misma de una película a la que tratan de olvidar a cada momento.
El humor negro, lo kitsch, lo pobre del guión, la confusa narrativa, las desganadas actuaciones, no aportan nada a una cinta que fue más por cumplir que por querer mostrarnos algo nuevo que parezca y se sienta como una corrección de continuidad a lo que vimos antes en Suicide Squad y no tratar de desacreditarla a cada momento y darle seguimiento a lo que empezó con Man of Steel en 2013
Es una lástima porque en lo personal sí quería que me gustara y que de alguna manera pudiera salvarse a si misma pero, no sucedió; no sé cuál vaya a ser el futuro de éste universo pero lo que sí me queda claro es que puede ser la última vez que vemos a éste personaje de Harley Quinn interpretado por Margot Robbie en la pantalla grande si es que no cancelan Gotham City Sirens que ha estado pendiente, como actriz ya vimos que puede dar mucho de si misma y que si aceptó hacer ésto fue porque en verdad le tiene amor al personaje, da todavía más pena que el propio estudio que la creó no se lo tenga.
Si tuviera que calificar esta película en serio me quedaría a deber porque queda muy por debajo de ser cumplidora.
