El gigante del streaming Netflix prometió tener un estreno de películas originales a la semana durante el 2021, una propuesta muy arriesgada tanto que ningún estudio de Hollywood ha planteado hacer en ningún momento, tomemos en cuenta que en este mercado hay producciones modestas hasta superproducciones y blockbusters para verano pero no todas consiguen el éxito que se espera.
La gran oportunidad que tiene la plataforma para seguir acaparando titulares y audiencia debe estar basada en contenido interesante y de calidad y es a nosotros los espectadores los que nos toca decidir qué es lo que veremos y que no, cuántos de esos largometrajes de contenido original van a valer la pena.
El primer “blockbuster” de Netflix en esa modalidad semanal para este 2021 es Outside the Wire, no es casualidad que su estreno haya sido el mismo día que Disney+ presentó WandaVision para hacer una competencia directa, la película protagonizada por Anthony Mackie y Damson Idris tiene una propuesta interesante para el género de la ciencia ficción.
¿De qué va la película?
En el año 2036 el piloto de drones Harp (Damson Idris) es enviado a una zona militar altamente peligrosa luego de tener un error táctico que costara la vida de 2 marines se encuentra con el Capitán Leo (Anthony Mackie) quien es un súper soldado androide altamente avanzado y experimental que se hace pasar por un oficial humano, juntos se embarcan en una misión para evitar que el terrorista Victor Koval (Pilou Asbæk) tome control de unos misiles nucleares de alto alcance para lanzarlos a los Estados Unidos y desatar así una guerra.
Este trabajo es una mezcla de películas del género bélico, espías y ciencia ficción que parece tener claro desde el primer momento que en lo argumental no va a ofrecer nada nuevo ni novedoso al espectador y es que esos primeros minutos están más encaminados a ser algo llamativo que a sentar las bases de la historia y a conocer el desarrollo de los personajes dentro de la trama.
Aquí no aplica que toda acción sea justificada por unos efectos especiales de muy mediana calidad y cae en el cliché de que es mejor ver la acción que explicar como es que sucede todo, el planteamiento de las cosas tiene graves tropiezos porque desde la ambientación sabemos que es una de esos trabajos de transición que nos van a llevar a un punto muy alejado de la idea principal.
El director Mikael Håfström quiere dar un enfoque diferente a lo que es el tema del tráfico de armas y el cine bélico de antaño pero es el guión de Rob Yescombe y Rowan Athaleque el que no ayuda a que este proyecto llegue a captar la atención, esto no quita que Anthony Mackie sea probablemente lo mejor que tiene porque ya ha demostrado su experiencia en cintas de acción siendo Falcon del MCU su personaje más recordado y aporta la confianza necesaria para poder desarrollar medianamente su personaje, lamentablemente todo resulta tan genérico que el impacto que puedan tener sus primeras apariciones se va diluyendo hasta acabar a un nivel muy bajo lo que es una pena porque su personaje es el único que tiene una evolución pero para entonces ya es demasiado tarde como para que nos importe.
Y es que lo que la cinta plantea nunca se desarrolla más allá de lo superficial y lo alargan con momentos innecesarios que no aportan ni concluyen nada, un recurso del que se abusa a lo largo de los 115 minutos que dura, tenemos claro que la película nunca va a ir más allá del espectáculo visual que presenta dejando completamente en el abandono la importancia de explicar la presencia de robots o de que el protagonista sea un androide, por ejemplo, falla en términos de planteamiento y de ejecución que se justifica con bombazos y acción o con chistes mal ubicados que pretenden romper un poco la tensión.
El elenco que apoya a Anthony Mackie y a Damson Idris lo conforman Emily Beecham, Michael Kelly, Pilou Asbæk as Victor, Kristina Tonteri-Young y Bobby Lockwood quienes hacen lo que pueden con lo que tienen una frase que he usado en repetidas ocasiones para definir que los actores pueden dar más a sus personajes cuando están bien dirigidos y llevan a cabo su trabajo en una historia sólida y concreta.
En conclusión Netflix no empezó con el pie derecho con Outside the Wire que es una producción fallida de ciencia-ficción que nunca consigue atrapar tu atención más allá de lo necesario con su reflexión sobre las guerras modernas, el tráfico de armas y las consecuencias que eso pueda traer.
Esperemos que sus próximos estrenos estén a un mejor nivel de entretenimiento pero sobre todo que sean trabajos que capten nuestra atención y nos dejen satisfechos.
La película ya está disponible desde el 15 de Enero en la plataforma de Netflix.
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