Las películas de posesiones demoníacas y entes malignos han sido del gusto popular desde hace décadas, cada una ha tenido su peculiaridad para contar sus historias y esto con el paso de los años se ha vuelto un subgénero de culto planteando reestructurando sus reglas.
Lo que llama la atención es cuando estas historias involucran a juguetes, muñecos y muñecas, unos de los más populares en este rubro es Chucky con su saga de películas, su reinicio y serie de televisión y Anabelle que está basada en hechos reales, fueron ellos quienes replantearon la manera de contar estas historias.
El hecho de que un inofensivo juguete para niños tenga intenciones malvadas y ande asesinando por doquier a quién se le cruce enfrente por proteger o bien, por tener sus propias motivaciones nos puede resultar espantoso aunque los resultados dejen mucho que desear en estos últimos años.
La ópera prima del director Gerard Johnstone mezcla este horror con ciencia ficción dándole un giro muy actual, M3GAN es la más reciente incursión a este género y proponiendo sus propias reglas para una nueva generación.
¿De qué va la película Megan?
Gemma (Allison Williams)es una talentosa ingeniero en robótica de una empresa de juguetes, cuando por un accidente debe hacerse cargo de su sobrina Cady (Violet McGraw) construye una muñeca que parece real y pronto se convierte en la cuidadora de la niña, una decisión que tendrá consecuencias inimaginables cuando su nueva y magnífica compañera comience a cobrar vida propia para protegerla de todo aquél que quiera hacerle daño.
Es más entretenido que interesante volver a ver este concepto en el cine, es cierto que a 35 años del estreno de Child’s Play en 1988 han pasado muchas cosas en el rubro de los muñecos asesinos, la manera de contar estas historias y actualizarlas para las nuevas generaciones no es tarea fácil y más aún teniendo precedentes tan populares, porque una cosa es que sea popular y otra que hagan sea bueno.
La película comienza planteando que todo esto es un enorme cliché con situaciones trilladas que hemos visto una y otra y otra vez con una secuencia que establece su tono de ser una sátira sobre otras películas del género del horror y la ciencia ficción, en los primeros minutos vemos un comercial que presenta un nuevo juguete algo parecido a un Furby llamado PurRpetual Pet o una mamada así, a una niña que acaba de perder a su mascota y esta es sustituída por este novedoso artículo que puede conectarse a una tablet y hasta se caga, la fantasía de cualquier niño gringo.
Luego vemos a Cady viajando con sus padres en el asiento trasero de un automóvil dirigiéndose a un albergue de esquí de Oregón para pasar cómoda y divertidamente unas vacaciones de invierno, típico y trillado que circulan por una carretera peligrosísima en donde es muy adivinable que tendrán un accidente con fatale consecuencias, un camión aparece frente a ellos y mata a los padres de Cady, corte a… conocemos a Gemma una ingeniera que trabaja para una empresa de juguetes de alta tecnología llamada Funki en la ciudad de Seattle, Gemma es la tía de Cady y la tutora legal de la niña ahora que su hermana y su cuñado han muerto.
Gemma no es una mujer del tipo maternal, más bien es el tipo de mujer independiente, exitosa que prefiere pasar más tiempo en su trabajo que en citas o con sus amistades, está demasiado ocupada con su trabajo como para pasar tiempo con Cady, por ejemplo y aunque trabaja para una empresa que manufactura juguetes de alta tecnología y carísimos por cierto, guarda sus juguetes en sus cajas en un estante en la sala de su casa, plantean que ellas 2 son todo lo que tienen, ellas 2 forman ahora una nueva familia y tendrán que aprender a convivir juntas al menos lo suficiente como para dejar satisfecho a un psiquiatra impuesto por la corte que se muestra escéptico y desconfiado de Gemma y sus métodos para educar y criar a una niña.
Es aquí de donde viene la primer decisión estúpida a conveniencia del guión, M3GAN parece ser la solución perfecta al “problema” de Gemma, este prototipo de robot con inteligencia artificial experimental con la capacidad de memorizar cantidades infinitas de información, algo muy al estilo de Short Circuit de 1986 pero más moderno y más en mala onda, también tiene la capacidad de educar, enseñar e instruir, una niñera tan perfecta que deja a Mary Poppins pendeja a su lado, es tan chingativa para la niña como una mamá que le recuerda a Cady que se lave las manos, que recoja sus cosas, que ponga atención, que coma todas sus verduras, que se duerma temprano, etc, ella parece ser lo que todos los niños necesitan y todos los padres desean en secreto, una compañera 24/7 y que los libere de la pesada responsabilidad de criar y educar para que vivan sus propias vidas mientras sus hijos están ocupados con estos diabólicos muñecos.
Como es de esperarse, el jefe de Gemma ve en este nuevo invento la oportunidad de hacerse más multimillonario, tanta es su ambición que presiona a la ingeniera a poner a prueba el nuevo producto con, sí adivinaron, su sobrina como su único sujeto, cosa que no puede malir sal de ninguna manera porque esta creación promete ser la compañera perfecta y supuestamente alcahueta para esta solitaria y afectada niña mientras que su tutora sigue trabajando perfeccionando éste y otros proyectos, lo curioso aquí es qué ella hará que el jefe sea rico pero ¿y ella no ganará dinero con esto? evidentemente no, ella solo es un vínculo para ese malévolo propósito, si quiere más dinero es simple, la despiden y le roban el proyecto y asunto solucionado.
Ya planteados los personajes y el escenario en el que van a jugar sobre sus propias reglas entonces se empieza a desarrollar la trama, una que tiene referencias descaradas a manera de sátira y burla de los éxitos de películas en los años 80 y 90 M3GAN de poco a poco se va transformando en algo sumamente peligroso, el vínculo que forman Cady y ella parece ser irrompible y hasta tóxico, aquí las referencias a Robocop de 1987, I.A. 2001, I’ Robot de 2004 retomando y modificando las directrices con las que se manejan los robots de una manera bizarra y retorcida.
La cinta juega con su propio ritmo narrativo pasa de la ciencia ficción a la intriga empresarial, al drama familiar, al drama interpersonal, a la comicidad, a la incorporación de sus mensajes y discursos morales, y deja el horror y el gore en un último plano, la mezcla de todos estos elementos no resulta ser tan torpe como se esperaría, es cierto que el n guión tiene unos agujeros magníficos que al final de cuentas no importan porque nos dejan ver en su final que esto es solo el principio de lo que puede ser una nueva saga.
M3GAN se aleja por completo del esquema del slasher al menos en esta primera entrega y se centra más en las sub tramas y en cómo desarrollarlas y como concluirlas de manera que parezca que nos han dicho todo lo que necesitamos cuando en realidad no nos han dicho nada, la parte importante de como se maneja el dolor de una gran pérdida hasta lo que sucede cuando una creación supera a su creador, el guión escrito por Akela Cooper y basado en la historia co escrita por James Wan tiene elementos demasiado modernos con frases ingeniosas, sarcasmo y humor negro que se integra muy bien a la percepción inquietante de algo que parece ser humano pero que no se mueve ni suena como tal y que resulta ser artificial.
Y también como es de esperarse la trama tiene fallos y puntos débiles, hilos sueltos, sun tramas inconclusas que parece que están puestas de manera intencional para retomarlas si bien nos va en otras entregas, la violencia que maneja aquí Gerard Johnstone se siente sumamente forzada sin llegar a explorar todo ese potencial sangriento que debe de tener para cumnplir con la cuota de poder pertenecer a un género de horror más definido, en ningún momento se pretende que esto sea horrible suena más a un episodio de muy larga duración que podría encajar muy fácilmente en la serie Black Mirrior o Twilight Zone, en donde ambos tienen historias similares.
Recrear a un personaje como M3GAN y que parezca que es real requirió de mucho trabajo y esfuerzo, cuidaron al máximo todos esos pequeños y diminutos detalles en sus gestos, sus extraños movimientos, su lenguaje que es preciso y muy exacto al manejar la información que posee y la que de poco a poco va adquiriendo, la meticulosidad en la que analiza las situaciones y cómo las imita, el elemento moderno que tiene y es lo que ha hecho que este proyecto tenga éxito es la incursión del internet y de sus influencers ya sean youtubers o tick tokeros, o cualquiera que haga lo que sea por tener seguidores, su estética es perfecta parece una niña moderna inmamable con delirios de grandeza cumpliendo cabalmente con el cliché gringo de que debe ser rubia con ojos claros y muy pero muy bonita, algo intencional que a cada momento nos indica que tanta perfección no puede ni podrá ser nunca un ser humano.
Otro punto derivado del anterior es cómo este robot va teniendo su propia personalidad y motivaciones y busca la manera de que al estar desconectada pueda estar activa en otros dispositivos como algo parecido a Siri o Alexa incluso estar oculta en dispositivos móviles y fijos, el horror gráfico que no vemos se compensa muy bien con el horror de sentirse observado y acechado en cada momento y en cada movimiento, por otro lado, el espionaje industrial en la rama de los juguetes es algo que si bien es interesante, se explora muy poco y se va más por el lado fácil de comparar a esta muñeca con el PurRpetual Pet o como chingados se llame, de lo comercial que puede ser pasar de una cosa a otra con una diferencia de millones de dólares de por medio, muestra de manera muy superficial la preferencia de los padres y de los niños hacia los productos nuevos y como se manejan estos en un mercado tecnológico muy competitivo en donde lo que más importa es innovar y ganar dinero a raudales.
El perverso marketing que rodea la presentación de M3GAN en su propio mercado, funciona como un GIF animado o bien como un meme, o como un producto que todo niño debe de tener en su vida, como una de las cosas más importantes que marcará una generación para seguir dando paso adelante en la tecnología del entretenimiento, como espectadores pensamos que si en ese mundo eso es real y peligroso ¿qué es lo que vendrá después? Este es un reto muy grande que tienen por delante si quieren que esto funcione como una nueva saga, el estar un paso adelante en este sentido y presentar cosas que de verdad sorprendan porque en cuanto a la trama no creo que haya mucho que hacer.
M3GAN desafía cualquier regla impuesta antes y fanfarronea y se regodea en sí misma como una obra que es profundamente superficial y que se muere por ser transgresora más que por aportar algo al género, que si bien lo hace es muy mínimo porque siendo objetivos James Wan lo hubiese hecho mucho mejor en la dirección de lo que aquí hace Gerard Johnstone que entre otras cosas plantea que esto es como la actualización de una app muy intencional y cursi dentro del subgénero de muñecos asesinos, tener al juguete homicida es un mero pretexto para contar lo demás y llevar el mensaje feminista sobre la importancia de la maternidad, la crianza, la convivencia, los hijos, la familia, el amor, la independencia profesional, y bla, bla, bla que ya hemos visto hasta el cansancio y que aquí lo volvemos a ver desde otro punto de vista.
Uno de los puntos que ha llamado la atención en este trabajo es la incorporación de una escena de baile que termina en la única escena gore y que sigue pareciendo muy poco arriesgada, dicho baile es posible dentro de la narrativa porque nos ubica más en el hecho de que muchas app y redes sociales han tenido este tipo de retos y que aquí se siente como una parodia de todo esto con el mensaje de que si se hace mal por más fácil que parezca puede tener consecuencias como ya sabemos que ha sucedido con niños que no razonan y que por tener seguidores y estar a la cabeza de un grupo de gente sin quehacer han hasta perdido la vida.
Si vemos todo esto como algo que entretiene se disfruta y mucho, fuera de sus mensajes y sus referencias lo que muestra es la posible realidad de un mundo ficticio basado en la realidad del mundo actual en el que vivimos, en donde la tecnología predomina por encima de cualquier cosa y de lo que se está dispuesto a hacer y a sacrificar por tenerla y ser parte de una evolución que nos ayudará día a día a tener una mejor vida aunque esta carezca completamente de calidad.
Los efectos especiales tampoco son la cosa del otro mundo, están bien hechos y bien planteados en lo que a M3GAN se refiere y debe ser así ya que es la “estrella” en esta historia, la mirada que se tiene al pasado y la que se dirige hacia el futuro resulta ser sumamente perturbadora y con estos sutiles y superficiales elementos es su aporte como un horror plausible y necesario en el que actualmente vivimos, lo que da entrada a que esto se explore más a fondo y como se debe con un director más capaz de dar una visión más exacta y estructurada de lo que nos quiera presentar, sí, a futuro.
El cast cuenta con Allison Williams, Amie Donald, Jenna Davis (como la voz de M3GAN), Violet McGraw, Jen Van Epps, Brian Jordan Alvarez, Jack Cassidy Y Stephane Garneau-Monten quienes hacen un buen trabajo que cumple con la encomienda de entretener y hacen lo que pueden con lo que tienen para desarrollar plana y simplemente sus personajes.
La música compuesta por Anthony Willis no es nada célebre y muy por separado de lo que estamos viendo, pero cuenta con la simplicidad que se necesita para algunas escenas en donde el horror se vuelve audiovisual que por ratos rompe su propia estética y la vuelve novedosa.
En conclusión, M3GAN es una cinta para pasar un buen rato, sin ser pretenciosa entretiene y cumple su cometido de ser un nuevo concepto slasher para una nueva generación más tecnológica.
M3GAN ya está disponible en salas cinematográficas de todo el país.
