Los estudios Marvel siguen adelante con sus planes de expandir su universo hasta donde más les pueda dar, en lo que va de este 2022 ya vimos Doctor Strange in the Multiverse of Madness, Thor: Love and Thunder y ahora la muy esperada secuela Black Panther: Wakanda Forever.
Tras el fallecimiento de Chadwick Boseman los estudios tenían un gran reto entre manos, hubo muchos rumores acerca de la cancelación de la cinta pero no habría un reemplazo para el actor, luego de muchos dices y diretes por parte de Marvel y de los fans que estaban a favor y unos en contra este proyecto tomó forma.
Es difícil que una película de alta producción como esta no tenga a su actor protagonista, puede o no resultar en un completo fracaso si las cosas no se hacen bien, en este y en muchos otros casos es el guión el que juega la parte más importante de todo y más aún si su predecesora goza de un gran éxito y popularidad.
¿De qué va la película?
La nación de Wakanda ha sido abierta al mundo y tras la muerte del Rey T’Challa (Chadwick Boseman) su madre la reina Ramonda (Angela Bassett), La princesa y su hermana Shuri (Letitia Wright) luchan por proteger a su nación de todo aquel que intenta lucrar con su tesoro pero esta no es la única amenaza a la que deberán enfrentarse, en las profundidades del mar Namor (Tenoch Huerta) rey de una nación submarina oculta tiene sus propios planes de conquista.
Es muy interesante como ha sido manejada esta historia, luego de su primera aparición en live action y la incursión de nuevos personajes le dan un giro distinto y más efectivo a lo que ya conocemos, Marvel Studios arriesga mucho con esta cinta que parece ser transitoria pero que también tiene su propia personalidad que se aleja en gran medida a su primera parte.
Si la vemos desde un punto de vista general la película parece haber sido fabricada al rededor de su fallecido protagonista, de alguna manera tenían que justificar esto y no por el personaje sino por el actor que dio mucho de sí mismo al personaje y en sus grabaciones, esto comienza así, Wakanda está de luto por el recientemente fallecido rey T’Challa, Shuri y la reina Ramonda encabezan el funeral vestidas con atuendos blancos siguiendo un féretro negro en cuya parte superior presenta un emblema plateado de la máscara de Black Panther y los brazos cruzados a manera de saludo y reverencia saludo de Wakanda, la procesión que recorre el reino mientras que sus habitantes bailan y cantan en memoria de su rey caído.
Estuvimos frente a una de las mejores adaptaciones de un personaje que era conocido pero no tan popular como los principales y que se convirtió en uno de los más exitosos, su presentación fue en Capitán América: Civil War (2016) y con su propia película Black Panther (2018) la excelente interpretación hizo que Boseman se convirtiera en la encarnación perfecta del héroe en su versión live action, su repentina muerte en agosto de 2020 a la edad de 43 años, después de una larga lucha privada contra el cáncer sorprendió a propios y extraños, el MCU perdió a un héroe con una personalidad única y una cultura ficticia que nos parecía sumamente real que la representaba en una manera positiva y progresista así como altamente tecnológica.
No hay manera de hablar de Black Panther: Wakanda Forever sin mencionar lo anterior ya que sienta un precedente y marca un an tes y un después para todos estos personajes y de la manera en la que se irán relacionando con los demás en futuras producciones, su concepto es nuevo pero que se apoya mucho en la nostalgia, nos hace partícipes de las emociones que se están viviendo porque, a diferencia de Iron Man que lo sabemos fallecido T’Challa es otra cosa, un noble que pertenece a una monarquía pero que lucha también contra el mal amparado por una tradición y una alta tecnología que lo convierte en algo muy diferente a los demás, aquí no es el dinero que pueda poseer un millonario sino que se habla de la educación y nobleza que hay para defender a su nación pero también a los que no pertenecen a ella, más que artefactos explosivos usa su sabiduría para enfrentarse a sus propios problemas.
Lo anterior es justamente lo que esta cinta no tiene, la manera en la que se ha estructurado esta historia va más por el lado de las consecuencias, Wakanda ha sido abierta al mundo como vimos al final de la primera parte y con ello vienen los problemas políticos, sociales, económicos a los que deben hacer frente y más de uno querrá hacerse del valioso vibranium, luego tenemos que su rel ha muerto y las consecuencias que esto trae a esta nación y no solo es buscar a un sucesor para el trono sino a un héroe que los defienda, todo esto nuevamente va por el lado del camino del héroe que llega de la nada a ser un grande.
Podemos decir que el resultado final de este proyecto termina siendo una película muy consecuente y pretenciosamente conveniente porque ya de paso presentamos a un personaje que tendrá su propia serie en streaming Ironheart (Dominique Thorne) y que a su vez busca a un nuevo/a (nueve?, jeje) Black Panther y cae en el cliché del feminismo y el racismo como medio para justificar la existencia de todo lo que vemos.
Es evidente que su director y guionista Ryan Coogler junto con Joe Robert Cole no no tienen el mismo tipo de libertad creativa con esta melancólica secuela que se siente innecesaria pero que sirve como transición para la presentación de nuevos personajes que da como resultado algunas quejas y algunos aplausos pero que no termina de concretar absolutamente nada, como fans queremos ver acción y no situaciones políticas lo que hace que su narrativa caiga por momentos y trate desesperadamente de levantarse cosa que no es del todo impactante, y si lo es es a cargo de Namor e Ironheart lo que ensombrece el momento en el que sabemos quién es ahora la nueva heroína de Wakanda.
La forma en que Coogler maneja los elementos resultan muy casuales por ejemplo cuando Ramonda cuestiona a las Naciones Unidas por compartir el vibranium con el mundo incluso cuando estos han intentado robarlo o Shuri que se ha encerrado en sí misma y en su laboratorio desarrollando armas de defensa para su nación lo que ella en realidad quiere es ver el mundo arder y que cada uno pague y sienta en carne viva su dolor y finalmente tenemos al antihéroe que todos esperábamos ver, Namor y sus atrocidades, aquí vemos nuevamente las consecuencias de tomar decisiones estúpidas que ponen en riesgo a todos, algo que favorece mucho a un guión que se siente endeble desde el principio.
Uno de los personajes que ha causado mucha polémica es sin duda Namor que ahora tiene una estética prehispánica que se aleja completamente de lo que conocemos de él en los cómics, el manejo de su presentación es muy atractivo, es misterioso y peligroso, La CIA utiliza una nueva máquina de detección de vibranium en una operación de perforación ilegal en el subsuelo marino, cuando son atacados se sospecha inmediatamente de Wakanda, lo que no saben es que hay algo más detrás de esto, una civilización submarina avanzada llamada Talokan, su rey es un poderoso mutante mejorado que se acerca directamente a la con un trato y una amenaza.
Si bien tenía mis dudas de cómo funcionaría este personaje en live action con esa estética venía dispuesto a hacerlo mierda, ahora me atrevo a decir que es lo mejor que tiene la cinta, independientemente de que la elección del actor para interpretarlo no es de mi completo y total agrado el trabajo que hace Tenoch Huerta es sobresaliente, trae de la nada a un personaje conocido y lo reinventa de una manera diferente, si no fuera por el exceso de CGI en las escenas de acción podríamos apreciarlo más, lo que se nos cuenta de él es lo necesario pero que no es suficiente, si si vuelven a caer en ese recurso de hueva de lo dejamos para más adelante, el problema aquí es que ahora queremos saber más sobre lo que sucedió antes, es más, puedo decir que quiero una película de él en solitario porque en serio, es muy cagante que nos dejen a medias con las cosas y las presentaciones.
El diseño de Talokan es extraordinario y queda muy bien en este mundo ficticio porque si lo vemos de una manera más objetiva e histórica hay muchos fallos, la presentación de sus guerreros es inquietante pero que se siente genuina a medida que emergen silenciosamente a las embarcaciones y al territorio de Wakanda, es de reconocer que el departamento de arte se esforzó lo suficiente para que este reino submarino luciera una gran belleza que establece uno de los conflictos morales más poderosos de la película, Wakanda sigue siendo tan gloriosa como la recordamos, la diseñadora de producción Hannah Beachler y la fotografía Autumn Durald Arkapaw hacen que sea una película visualmente impresionante en la historia de todo el MCU.
El final nos deja clara una cosa, esto puede o no mejorar a futuro su escena post créditos nos revela lo que ya muchos sabíamos, T’Challa tiene un hijo y que si saben manejar esto puede llegar a ser una gran sorpresa en alguna de las fases posteriores en este universo.
Ironherart en cambio sirve solo para apoyar el discurso feminista, su participación es mínima y muy regular, es inevitable no compararla con Iron Man y el estupendo trabajo que por varios años hizo Robert Dawney Jr. Vemos a esta chica tratando de sobresalir en un mundo en el que los héroes más poderosos han demostrado su valía al salvar una y otra vez al mundo, ese cliché de no puedo pero si pero luego no pero luego sí es sumamente adivinable porque sabemos ya que tendrá una serie propia y que en ella creo explicarán más de lo que vemos aquí.
La ambientación juega mucho con sus espacios, por un lado vemos lo colorido que puede ser el mundo, la magnificencia y brillo de Wakanda y la oscuridad de Talokan en un contraste muy bien manejado porque cada uno establece la base de lo que sus personajes están viviendo, en un punto convergen estas tres cosas en un balance perfecto de imagenes y sonido.
Los efectos especiales son el punto más flojo, el exceso innecesario de CGI por tratar de que todo parezca espectacular lo hace poco creíble pero qué más da si es una película de superhéroes en donde es justamente lo que se busca, espectacularidad más que calidad algo que distingue a estos estudios en sus producciones, el fallo más grande está en su guión que no concreta una dirección específica de hacia dónde quiere ir y de qué manera esto encajaría con las fases anteriores del MCU y de las que están por venir porque es curioso que ya haya una nueva Black Widow, una nueva Hawkeye y ahora una nueva Black Phanter, las mujeres están predominando y no lo veo nada mal al contrario, lo que puede cuestionarse es la manera en la que han sido presentadas.
El fallo que de cajón prevalece y del cual no han entendido que ya estamos hasta la madre es ese mensaje del amor, de la amistad, de la responsabilidad, del respeto, de la aceptación, del valor que hay en cada uno de nosotros, de que el que quiere puede, de que las mujeres son capaces también de ser heroínas y salvar al mundo de sus amenazas, señores, eso ya lo sabemos nos lo han presentado hasta el cansancio y es justamente esto lo que aquí demerita a estos personajes, están tan cuidados de parecer políticamente correctos que dejan a un lado la importancia de tener una personalidad propia.
El cast tiene a Letitia Wright, Lupita Nyong’o, Danai Gurira, Winston Duke, Florence Kasumba, Dominique Thorne, Michaela Coel, Martin Freeman, Julia Louis-Dreyfus, Tenoch Huerta y Angela Bassett, actores que se integran muy bien con sus personajes y que entienden bien de lo que se trata.
La música compuesta nuevamente por Ludwig Göransson suena también a una secuela de lo que audiovisualmente vimos antes, con nuevas piezas que fueron diseñadas para los nuevos personajes encajan perfectamente con cada una de las escenas que vemos en pantalla, un muy buen y destacable trabajo.
En conclusión, Black Panther: Wakanda Forever se siente como algo más independiente que a una secuela, necesaria o innecesaria ya está aquí ahora es a usted querido lector al que le toca decidir si esto da para más en futuras secuelas o este es el final de algo más grande que se ha visto afectado por la muerte de su protagonista, un trabajo que queda a medias y que nos hace preguntarnos cómo habría sido esto si Boseman aún estuviera aquí.
En memoria de Chadwick Boseman 1976-2020.
Black Panther: Wakanda Forever ya está de estreno en salas cinematográficas de nuestro país. Llega a Disney Plus el 1 de Febrero 2023.
