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Reseña de Thor: Love and Thunder aún está resolviendo hacia donde debe ir

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En 2011 el director Kenneth Branagh presentó en pantalla grande y como parte del MCU la historia de Thor, el príncipe heredero de Asgard que es exiliado de su hogar a la Tierra, a esta vinieron 3 secuelas más Thor: The Dark World de Alan Taylor (2013), Thor: Ragnarok de Taika Waititi (2017) y finalmente en este 2022 Thor: Love and Thunder llega para dar un nuevo giro al personaje.

Luego de culminar una etapa de más de 10 años para estos héroes las cosas parecen estar cambiando, la inclusión de nuevos personajes en nuevas historias ha funcionado quizá no de la manera en la que propios y extraños esperábamos pero que han abierto brecha a lo que veremos en un futuro.

Thor: Love and Thunder se enfrenta al gran reto de seguir permaneciendo vigente como uno de los principales personajes de este nuevo universo y que al parecer aún tiene mucho por contar.

¿De qué va la película?

Luego de lo sucedido en Avengers: Endgame, los Guardianes de la Galaxia deben convencer a Thor (Chris Hemsworth) para que regrese al campo de batalla y se enfrente a un villano que ha comenzado a matar Dioses y a toda criatura divina en el cosmos, tarea que no será fácil sin la ayuda de Valkyrie (Tessa Thompson), Korg (Taika Waititi) y su ex novia Jane Foster (Natalie Portman) quien ahora usa el mítico martillo Mjolnir y posee su gran poder convirtiéndose en Mighty Thor, juntos tendrán no solo que vencer a este ser, sino también descubrir que lugar ocupará cada uno en la vida del otro como equipo, como amigos y como Dioses.

La película se siente más como un trabajo más de Taika Waititi y menos como una del súper héroe que ya todos conocemos, de cualquier manera esto no pretende ser algo serio y tampoco que pueda dejar huella o un precedente importante al desarrollo de esta nueva etapa, es simplemente para pasar un buen rato y tratar de complacer a los más exigentes con su fan service.

La cinta comienza con un hombre extraterrestre de origen anodino, Gorr (Christian Bale) caminando por un desierto, deshidratado y abandonado  con una niña pequeña en sus brazos con la esperanza de que aquél Dios al que tanto ha venerado y servido pueda ayudarle a sobrevivir pero, las cosas no son lo que parecen y estas deidades lo que han buscado es reírse de aquellos que creen en ellos, que su infinito poder solo sirve para fines propios y egoístas que lo han dejado sufrir y es donde este ser toma la Necrosword  y le mata, ahora se ha hecho el firme propósito de liberar a la galaxia de todos ellos.

la película presenta a un héroe nuevo y mucho más interesante en Jane Foster, a quien conocemos por ser el interés amoroso humano de Thor, ahora, ella empuña las piezas restauradas del martillo Mjolnir convirtiéndose en el Mighty Thor con casco, capa y los poderes que esto incluye pero hay un precio que debe pagar, cada vez que evoca el poder del martillo le quita capacidad humana lo cual es aún más devastador porque nos enteramos que tiene un cáncer incurable en etapa cuatro, este elemento es conmovedor y sorprendente quizá tanto como la motivación que tiene el villano para deshacerse de todo aquello en lo que ha creído, esta dualidad de hechos le da un nuevo enfoque a lo que esperamos ver.

Por un lado vemos a este personaje femenino que ha sido estructurado como una mujer fuerte, con estudios, una científica que ve en la magia la posibilidad de una cura para lo que la aqueja y que de a poco a poco la va consumiendo, es innegable que es encantador ver nuevamente a Portman en este universo encarnando a una heroína con todo su potencial, por otro lado vemos a Gorr the God Butcher un personaje torturado y lleno de odio que busca venganza usando un poder que le proporcionan las sombras, después de la muerte de su hija se convierte en un no creyente y es elegido por un arma llamada Necrosword con la que crea un ejército de bestias negras que cambian de forma para matar a todos los dioses comenzando por  aquel que ignoró sus peticiones y suplicas de ayuda, mientras ella intenta sobrevivir, él quiere que se haga justicia por lo que considera el engaño en el que ha vivido y que estas deidades han promovido, esto brinda un elemento nuevo al mito del súper héroe con personajes más humanos y más humildes.

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Es cierto que las historias presentadas por estos estudios han carecido de villanos que estén a la altura de los héroes, a excepción de Loki, Eric Killmonger y Thanos los demás han sido solamente una referencia a lo que son en las viñetas de los cómics pero que difícilmente han sido bien adaptados, aún recordamos lo pésimo de Ben Kingsley como el Mandarín en la infame Iron Man 3 o lo breve de Hugo Weaving como Red Skull en Captain América: The First Avenger, Crossbones, Ronan, Kaecilius, entre otros de los que esperábamos ver mucho más, lo que vemos aquí no es precisamente una historia de origen, es la presentación y el desarrollo de lo que yo podría considerar un anti-héroe más que un villano, es claro que sus motivaciones van por ese lado y hace cosas muy propias pero que se aleja de lo que conocemos para tener su propia personalidad, su propia estética, su propio estilo.

Es de esperarse que Gorr the God Butcher ataque New Asgard en una muy bien montada escena de lucha en donde podemos apreciar el poder que tiene y el por qué hace lo que hace, el problema aquí ya es un cliché muy gastado en estas producciones en donde o todo pasa en la noche o debe tener elementos oscuros que más que jugar con el espectador a que adivine lo que está viendo interrumpe la narrativa audiovisual de la misma historia, no sé quién haya dicho que hacer esto es interesante y misterioso, es todo lo contrario, ya cansa. ya aburre y es un recurso que ya nos sabe demasiado estúpido para películas como esta en donde lo que queremos es ver la acción limpia, esta secuencia que pretende ser impactante y  aterradora simplemente sucede sin causar el impacto que todos esperamos es difícil seguir lo que sucede en la oscuridad, ver a estas criaturas de las sombras luchar contra los asgardianos que secuestran a sus hijos, todo esto es tan inconexo, un edificio en llamas que se derrumba como fondo cuando vemos a Thor re encontrándose con Jane ahora transformada en Mighty Thor simplemente y muy específico en este caso, no funciona.

Para detener a Gorr y salvar a los niños secuestrados Thor, Jane, Valkyrie y Korg visitan a Zeus y a los otros dioses, su representación no tiene mucho que ver con lo que sabemos de ellos por la mitología que ocupan o bien por como han sido en las viñetas, aquí son  seres holgazanes y huevones que viven a todo lujo y hablan de cosas tan banales como quienes irán a la próxima orgía, en este punto entendemos bien por qué los están matando y más allá de que eso sorprenda la verdad es que se celebra, un momento en el que la película intenta construir algo que parezca más sólido en su trama, algo que podamos ver a futuro en este universo tanto que una escena post créditos ya muy típicas de Marvel Studios da una idea de lo que puede venir con estos y con otros nuevos personajes que se unan a una aventura que igualmente pretende ser una meta historia, es que toso aquí pretende ser algo que no es y que confunde y deja un gran sin sabor.

Ya vimos lo que sucedió con Spider-Man: No Way Home y Doctor Strange in the Multiverse of Madness, Thor: Love and Thunder es un excelente ejemplo de los estudios Marvel aún no están seguros de cómo retomar las narrativas de sus historias que se interrumpen por eventos cruzados masivos, esto claramente quiere mantener su enfoque en Thor que tiuene mucho menos tiempo en pantalla que en otras producciones, ha sucedido tanto dentro del MCU que como espectadores no podemos llegar sin saber nada de lo anterior, las constantes referencias, el fan service nos obliga a estar en un punto medio entre lo que ha sido y será Love and Thunder trata desesperadamente de crear un sentido cohesivo y convincente que la enlace directamente con sus predecesoras y podamos armar una línea en la que estos eventos parezca que son una continuación, un nuevo capítulo en esta saga.

Que gran problema es llevar las cosas de lo serio a una comedia romántica con tintes de acción, los frecuentes altibajos que tiene su guión escrito por Jennifer Kaityn Robinson y el mismo Waititi lleva más estos eventos por el lado de lo simple, a ratos se siente como si estuviéramos viendo un capítulo de la serie Friends, con esos chistecitos, su comedia de situación, los enredos  se sienten como el intento que tienen los estudios y su director para probar que las las películas de Thor son solo para entretener, que poco importa si esta o no basada en un comic y que esta historia se respete, y en este caso se da pero más por casualidad que por estar planeado anticipadamente, la química que hay entre Portman y Hemsworth es tan buena como lo vimos desde un inicio y funciona bien en los momentos cómicos, mágicos y musicales, el problema nuevamente se presenta cuando tiene que cambiar el ritmo para centrarse en Gorr.

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En cuanto al diseño de producción no hay queja, si algo tiene Marvel es que sabe muy bien como deben lucir sus héroes en pantalla, los trajes, las poses, el entorno, todo esto es visualmente increíble, Waititi como director juega mucho con los colores, con lo visual y lo temático que bien puede pasar sin problema al blanco y negro que requieren las escenas con Gorr, como la pelea entre este y Thor en un diminuto planeta que drena el color y usa destellos seleccionados de luz azul dando un gran efecto audiovisual, no podía faltar el empalagoso mensaje sobre el amor, la familia, la amistad, la fuerza de voluntad, que cada vez suelen ser más evidentes y pareciera que las producciones actuales no pueden sobrevivir sin esto, y yo me pregunto ¿para qué, son realmente necesarios para seguir educando a la audiencia?

El final es de lo más predecible, bien sabemos que el costo de tener a Portman en el elenco nos invita desde el primer momento a saber que esto no termina aquí y lo confirman las 2 escenas post créditos, seguiremos viendo más de este dúo en un futuro en adaptaciones que son todo menos algo que se muestre en el material de origen y que sirve como gancho para atraer y conservar a nuevos y viejos espectadores.

El cast tiene a Chris Hemsworth, Christian Bale, Tessa Thompson, Jaimie Alexander, Taika Waititi, Russell Crowe y Natalie Portman quienes entre tantas bromas y chistes no necesitan un trabajo histriónico impresionante, en el caso de Bale como villano se pierde y se diluye porque ya sabemos que al final de todo va a redimirse, eso sin contar que es muy cómodo para el actor hacer esa voz grave y aparentemente atemorizante que le escuchamos en la trilogía de Batman dirigida por Nolan.

La música compuesta por Michael Giacchino es impresionante, luego de sus anteriores trabajos con estos estudios ya entiende muy bien la personalidad de estos personajes y entrega algo que está muy acorde y quizá por encima de lo esperado, las constantes canciones de Guns & Roses para algunas de las escenas de acción incluyendo el trailer abogan mucho por la nostalgia ochentera muy de moda, quedan bien pero nada más.

En conclusión, Thor: Love and Thunder no es tan decepcionante como se podía esperar para un blockbuster de este tamaño, no es un mal producto si lo que se busca es pasar un rato entretenido, es seguro que veremos más entregas en el futuro las cuales seguramente tratarán de complacer a todos aquellos que están seguros de que esto puede mejorar, esta entrega queda solo como un capítulo torpe y mal llevado en lo que parece una franquicia que todavía está resolviendo hacia donde debe ir.

Thor: Love and Thunder ya está disponible en salas cinematográficas de todo el país.

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