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Reseña Documental: Arnold es más el show de una celebridad que una bioserie documental

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Ser un actor y ser una estrella son cosas muy diferentes, en Hollywood y durante décadas este fenómeno se ha presentado para hacer de sus producciones todo un éxito, caras bonitas, cuerpos estilizados han pasado por la pantalla grande, pero ¿qué hay del talento?

Las décadas de los 70, 80 y 90 fueron muy prolíficas en cuanto a producciones exitosas con guiones y direcciones que no necesitaban de tener a grandes actores como protagonistas, lo que importaba era el éxito comercial, es cierto que solo los más fuertes, los talentosos son los que sobreviven en una industria que necesita de un renombre para atraer al público a las salas de cine y hoy en día a las plataformas de streaming.

Es sorprendente cómo ha evolucionado el medio del entretenimiento a lo largo de los años y que y que podamos disfrutar de eso ahora, Hercules in New York (1970) le dio la oportunidad a un joven de 23 años al que llamaban Arnold Strong “Mr. Universe” y que más tarde todo el mundo conocería como Arnold Schwarzenegger que con su impresionante físico y su característico acento vendría a revolucionar a la industria certificando a los héroes de acción.

En este 2023 Netflix presenta una serie documental biográfica contada por él mismo de cómo ha sido su vida desde sus inicios pasando por sus grandes éxitos en la pantalla grande, su incursión en la política y hasta nuestros días.

¿De qué va la bioserie documental?

Una serie que intimista y narra la polifacética vida personal y profesional de la estrella de cine Arnold Schwarzenegger que ha pasado de ser campeón de culturismo a político, pasando por icono de Hollywood, Arnold profundiza en un fascinante viaje relatando sus logros en el físico culturismo, su ascenso al estrellato, su exitosa carrera y su transición a la política, una mirada más profunda y detallada del hombre detrás de su multifacética personalidad pública.

Quizá alguna vez nos hayamos preguntado ¿cómo sería nuestra vida y la de quienes nos rodean si ésta fuera una serie de televisión? ¿diríamos la verdad y las cosas buenas, las malas y las más oscuras en nuestra vida?

La respuesta a estas preguntas puede ser que es difícil hablar de uno mismo, que cada cosa que hemos hecho a lo largo de nuestras vidas ha tenido consecuencias buenas y malas, que ser las estrellas de un show que creemos que a nadie le interesa ver es justamente lo que esta serie bio documental pretende mostrar de uno de los íconos más importantes en la cinematografía mundial.

La serie por sí misma es aduladora una biografía  simplificada de Arnold Alois Schwarzenegger / Arnold Schwarzenegger, dividida en 3 episodios de 60 min de duración y que cada uno está dedicado a sus tres carreras principales, sus inicios como físico culturista, estrella de cine y político, Cuando se trata de hablar de estos temas y tratar de profundizar en ellos puede ofrecer presentaciones y monólogos insignificantes, como estar ante la cámara y narrar en off lo que vayamos recordando para editarlo de una forma cronológica de hechos y vivencias, esto puede ser muy autocomplaciente cuando dejamos a un lado esa parte que es tan privada que no quieren que el público conozca, Arnold se pone cómodo y charla sobre su vida de una manera fácil y sencilla haciendo hincapié a sus orígenes, lo complicado que fue para él aventurarse en un medio que no conocía y al que quería pertenecer.

No es la primera vez que un actor y en este caso una estrella de cine muestra su vida como supuestamente ha sido, está bio serie documental hay que verla con cierta distancia en el sentido de que es él mismo contando una historia de la que no sabemos qué tanto de todo esto es cierto y qué no, qué es lo que ha ocultado y qué no, iniciando con su vida en Austria va recordando y narrando cómo era su infancia, su familia teniendo a un padre militar y golpeador y de cómo un día en una sala de cine decide que es lo que quiere hacer pero para eso necesita primero ejercitar su cuerpo.

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De esto pasamos a su intento por pertenecer a la milicia táctica como un conductor de tanques de asalto que no trascendió por su estatura, su motivación luego de esto fue más física y empezó con los concursos en los que fue ascendiendo y escalando en los primeros lugares haciéndose de fama y dinero en ese ámbito lo que lo lleva a mudarse a varios países Europeos hasta que llega Norteamérica, lo demás podemos decir que ya es una historia que conocemos, y aunque todo esto sea muy personal e intimista vemos a un Arnold muy cómodo y lo que transmite es como una charla informal entre amigos.

La serie cuenta con muy buena producción que no solo puede complacer a sus fans sino que está planeada para un público en general incluso para todos aquellos que ya compran lo que ahora vende, podemos apreciar que ha sido un hombre imparable en lo que a perseguir un sueño se refiere y esto puede ser sin problema alguno el mensaje motivador de que podemos conseguir todo lo que nos propongamos, que al igual que él podemos superar grandes adversidades hasta conseguir lo que queramos y nos deje satisfechos.

Como es de esperarse hay momentos graciosos, otros en los que narra lo que significó para él hacer éxitos de taquilla como Conan the Barbarian (1982), Conan the Destroyer (1984), The Terminator (1984), Commando (1985), Predator (1987) y su incursión como hombre de acción en la comedia con cintas como Kindergarten Cop (1990), True Lies (1994), Junior (1994), Jingle All the Way (1996) que representaron éxitos en taquilla y en otros más incómodos de cuando toca el turno de hablar de los aspectos más bajos de su carrera como ser “El villano”  en una película  de superhéroes, Batman y Robin (1987) que significó un fracaso en taquilla y un tropezón en su carrera la supuesta rivalidad con Sylvester Stallone y su acercamiento a James Cameron como director.

Las anécdotas de los momentos de su vida pública que van desde que conoció a su ex esposa Maria Shriver hasta su relación extramatrimonial con Mildred Patricia Baena, y su hijo Joseph son tocadas muy por encima sin ahondar mucho en el tema, mismo caso sobre su carrera política y su participación en los derechos de los inmigrantes en Estados Unidos, sobre esto último podemos entrar en polémica si tomamos en cuenta que él mismo es un inmigrante y su postura ante eso puede ser muy cuestionable y traiciona todo lo que puede comentar sobre el tema.

Todos sabemos quién es Arnold Schwarzenegger como una figura pública pero muy poco conocemos de cómo es Arnold Schwarzenegger en su vida cotidiana y lejos de reflectores, su personalidad es mediática y bulliciosa, es muy divertido verlo narrando aspectos de su vida familiar con sus hijos llevándola a su antojo y por donde quiere, básicamente nos cuenta lo que quiere contarnos y lo que quiere que sepamos ni más ni menos, otro tema que descarta como polémico es sobre el antisemitismo como una ideología estúpida y perdedora, tampoco habla ni dice nada  sobre todo la información que se usó durante su campaña política para desprestigiarlo y que afectó no solo su imagen sino su relación familiar.

Los creadores Lesley Chilcott y Allen Hughes saben muy bien por dónde llevar las cosas para que todo esto parezca más un espectáculo televisivo que algo que defina a una estrella de cine famosa, la dirección de Lesley Chilcott toma el lado más amable de Arnold y lo retrata como una persona común pero que vive en el ojo del espectador, el retrato de su privacidad y de su forma de vivir es lo que más nos puede atraer de todo esto, nada aquí se siente forzado pero sí sumamente estudiado para que al final pensemos y digamos “qué buena onda es Arnold”

Su narrativa tiene momentos brillantes en los que vemos que siendo “todomusculoso” ha tenido problemas de salud y el trabajar en la cinta End of Days (1999) después de haber pasado por una cirugía de corazón, lo que más le ha ayudado es su actitud de vivamos el día a día y sigamos adelante, como bio serie documental está muy lejos de ser perfecta y creíble es simplemente “El Show de Arnold” uno de los grandes fallos que tiene es el hecho de que cae más en lo espectacular y farandulesco que arriesgar a presentar las cosas como son, los directores tienen la tendencia a desviar el enfoque principal y las reglas que aplican a un documental, en este caso la estructura de lo que vemos le permite a su estrella contar su historia haciéndola tan personal y tan placentera como le dé la gana.

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Los momentos menos forzados son aquellos en los que como persona admita y acepte sus defectos que tiene adversidades como todos y cada uno de nosotros, que al final y lejos del éxito, la fama, el dinero y el reconocimiento del público es una persona como cualquier otra, también caga y mea e incluso se pedorrea pero como espectadores y fans creemos que sus glamorosas vidas son el sueño imposible de cualquiera, la sensación de que solo algunas personas han sido tocadas por Midas y se convierten en lo que son, pero nunca tomamos en cuenta que para ser los mejores en lo que nos gusta tenemos que trabajarlo porque nada se nos da de a gratis.

Es interesante y limitadas las participaciones de actores y estrellas como Danny DeVito, Jaime Lee Curtis e incluso su familia hablando y comentando de varios de los temas que se tratan, humanizar pero al mismo tiempo admirar al hombre y al compañero de trabajo queda muy por debajo de lo que realmente pueda ayudar al documental a ser más real y verídico, todo en él está puesto para su propio beneficio alejándose por completo de la simetría de lo que debe ser un documental.

No podemos negar que con el paso de los años Arnold Schwarzenegger es sumamente identificable por todos, nos guste o no el cine el hombre, la estrella ya tiene un lugar en la historia cinematográfica y en la humanidad no como aquel que ha hecho mucho por los demás, sino por ser la estrella que él quería ser y tener el éxito que le permitió hacer películas no por dinero sino por ser una celebridad aunque ya en nuestros tiempos y con 75 años su carrera ha dado giros en los que a las nuevas generaciones les cuesta relacionarlo con lo que Hollywood pide ahora, decir que ya se retire de la actuación y se dedique a vivir en paz sus logros sería demasiado condescendiente con un hombre que ha hecho y seguirá haciendo lo que quiere.

En conclusión, Arnold como serie bio documental fracasa completamente pero funciona más como un show muy preparado y estudiado de una charla informal que tiene una estrella y celebridad entre amigos en la que nos contamos qué ha sido de nuestras vidas, un trabajo que solo sirve para entretener de muy buena manera.

Arnold ya está disponible en la plataforma Netflix.

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