El universo de Star Wars ha visto una gran oportunidad de seguir contando sus historias en la plataforma de Disney + series como, The Mandalorian, The Book of Boba Fett han sido del agrado de propios y extraños.
La trilogía original ha mostrado que sus personajes son muy queridos especialmente por sus fans, ya sea porque son héroes o villanos ya forman parte de la cultura pop, han logrado trascender a otros medios para seguir desarrollándose con otras historias.
Una serie muy esperada ha sido Star Wars: Obi-Wan Kenobi, maestro Jedi al que pudimos ver en los episodios I, II y III así como en la serie de animación digital Star Wars: Clone Wars y que ahora estrena su propia mini-serie live action.
¿De qué va la serie?
10 años han pasado desde que terminara la guerra y de que se ejecutara la orden 66 que acabó con la mayoría de los Jedi’s, Ben Kenobi (Ewan McGregor) vive aislado de todo y lidiando con un pasado que ha quedado en manos de un niño al que debe proteger, la llegada de inquisidores al planeta Tatooine lo pondrá en alerta ya que el imperio aún busca a los sobrevivientes para exterminarlos.
Esta serie enfoca al personaje años después de lo que ha sucedido con la orden Jedi, aquí vemos a un Obi-Wan mayor que vive su día a día escondido de todo y de todos en una cueva en el deserto, busca una manera de redimir algo que cree fue su error, perder a su padawan y que este eligiera el lado oscuro es algo que lo tiene obsesionado, así mismo, cuida a lo lejos del niño Skywalker quien todavía está a años de convertirse en el héroe que ya todos conocemos.
El primer episodio abre con un resumen de lo que fueron los episodios I, II y III para ubicarnos en un futuro en el que vemos que el imperio ha logrado controlar una gran parte de la galaxia, seguido a esto están los antagonistas, un trío de inquisidores encabezados por el Gran Inquisidor (Rupert Friend) son una élite de guerreros del lado oscuro que sirven a Darth Vader y al Emperador con el único objetivo de eliminar hasta el último Jedi de la galaxia para gloria del Imperio, siguen buscando sobrevivientes y es Reva la que también sigue obsesionada con encontrar a Kenobi y matarlo, su método de búsqueda es más impulsivo lo que puede representar un gran problema para completar su misión.
Si bien el final de Star Wars Episode III: Revenge of the Sith da esperanza también vemos como esto se conecta directamente con la trilogía original, vemos a Kenobi entregando a Luke recién nacido a sus tíos, durante los años que han pasado vemos que se ha transformado en un hombre destrozado, es fiel testigo de la injusticia que sufre el planeta pero no tiene la pasión y la fuerza para luchar contra esto, se sabe solo y sabe también que hacerle frente no es la mejor opción sin revelar su verdadera naturaleza la cual no solo lo pondrá en peligro sino a todo aquel que le conoce.
La única misión que tiene en mente es algún día poder entrenar a Luke como Jedi, algo que sabemos es muy peligroso en el tiempo en el que se está desarrollando esta serie, su padre Darth Vader junto con el emperador son los objetivos a vencer o al menos intentar hacerlo, por otra parte tenemos a la pequeña Leia y como vive en Alderaan, es una niña rebelde por naturaleza a la que le gusta vivir nuevas aventuras lejos de casa y de la supervisión de sus padres, es inteligente e impulsiva lo cual será una de sus más conocidas características.
Ver esta serie evoca demasiado a la nostalgia, sabemos en qué terminarán estos personajes y también sabemos que todo lo que hagan no evitará que eso suceda, en este punto no sé si estamos o no perdiendo el tiempo con una aventura que puede no tener sentido en los 6 episodios que la conforman, lo poco o mucho que puedan contar sobre estos personajes solo sirve como un complemento al ya extenso fan service que han tenido estas producciones.
Aquí no hay nada novedoso, nada que nos pueda sorprender, lo que hay es un juego directo con los fans que vemos como se van conectando las cosas entre una trilogía y otra, que vemos a los personajes en situaciones distintas y algunos más que tienen un desarrollo forzado como los son los tíos de Luke y los padres adoptivos de Leia, los flashbacks son de cosas que ya sabemos, que ya vimos y como es de esperarse aquí toman un giro diferente.
Estamos ante una gran producción al nivel de lo que han sido las anteriores, su ambientación y todo el derroche técnico en efectos especiales es impresionante, volver a ver a McGregor como Obi-Wan Kenobi es una delicia, un gran actor en un gran personaje que bien puede tener una gran historia por contar, los demás elementos que rodean a todo esto no se siente que estén bien puestos y más aún, en este punto nos preguntamos ¿es esta serie necesaria para revivir o bien reafirmar el cannon que ha tenido por muchos años Star Wars? la respuesta puede ser un sí condicionado.
Es claro que hay que ver esto en un contexto más específico, esta serie no fue creada para los fans de antaño sino para las generaciones que vivieron la trilogía de pre-cuelas, algo que sirve como un acto redentor que busca desesperadamente mantener el interés y por supuesto suscriptores, este es un proyecto que pretende tomar a este personaje y ponerlo en un mundo más serio, más actual pero que a su vez sirva como una pre-cuela para la primer trilogía, Star Wars como una exitosa franquicia está abriendo nuevos caminos aunque el objetivo final de esto sea algo completamente diferente, nada en Obi-Wan Kenobi como serie complementaria parece interesado en correr un riesgo real y se siente más como un producto para nuevos y viejos fanáticos que está diseñado estratégicamente para enganchar a los suscriptores, algo en lo que ya han tenido éxito desde la primer temporada de The Mandalorian.
Sobre su historia aún no tenemos nada claro, su estructura es la misma que han llevado series anteriores, aquí sabemos que ya hay un imperio galáctico gobernado por los Sith y fugitivos Jedi que se esconden o huyen para salvar sus vidas, se pretende que esto concrete más la saga referente a la familia Skywalker, una tarea difícil de representar y de llevar a cabo si ya tenemos desde hace años lo que va a suceder con cada uno de ellos, el problema aquí no es lo anterior es el hecho de que están dando saltos de una serie a otra, unas antes y otras entre películas y esta estructura confunde su propio desarrollo y entorpece su narrativa y esto es así, Obi-Wan Kenobi se desarrolla 10 años después de los eventos de La venganza de los Sith, esto significa que el programa se desarrolla nueve años antes de A New Hope que es el episodio IV de la trilogía original y la ubica justo en un punto medio entre la trilogía de pre-cuelas y la trilogía original en términos de cronológicamente exactos pero que también es un año después de los eventos de Solo: A Star Wars Story.
Este período de la línea de tiempo original es conocido como la era del Imperio o The Dark Times como lo conocen los seguidores de la primer saga, tiempo antes de que se formara uniera la Alianza Rebelde que sucede 7 años después de Obi-Wan Kenobi, aquí el Imperio aún no tiene una oposición como tal que es aquí donde entra la serie animada Star Wars: Rebels que se ubica 4 años después.
Todo esto parece estar bien planeado pero, su fallo radica en que se debe de tener este conocimiento para entender que es lo que estamos viendo y qué es lo que va a pasar, si no se tiene esto como base la serie funciona pero no en la totalidad en la que debe ser, por un lado es lo que cualquier fan está esperando ver pero por otro es un truco sucio para engañar a quienes no lo tienen y que de una forma o de otra tendrán que investigar y esto no es tarea del espectador pero es así como juega sus cartas Disney con este universo.
Es predecible que esta serie pretende tener algo más allá de cosas y personajes que ya conocemos, Leia ha sido agregada a esta historia simplemente porque ya la conocemos, porque sabemos que es la hermana gemela de Luke, un argumento que no es nada convincente y tampoco pretende justificar el por qué la necesitamos, lo que vemos de ella es innecesario e intrascendente para el personaje protagónico que parece que no puede solo con la carga de destacar en este y en los episodios restantes.
La dirección de los 6 episodios está a cargo de Deborah Chow (The High Cost of Living) que está más acostumbrada a manejarse en el género dramático que en el de acción y ciencia ficción fantástica, su paso por The Mandalorian en un par de episodios es bueno pero que no le da aún las tablas necesarias para desarrollar a un personaje como este y plantearlo de una manera más compleja, la historia y el guión a cargo de Stuart Beattie y Hossein Amini se basa más en elementos conocidos que en un aporte nuevo a esta franquicia, es prematuro asegurar que será un éxito o un fracaso dado que ya conocemos de la estructura de estas series y de como es de lenta su narrativa, de como dejan todo para el último momento en el que pretenden resolver en minutos todo lo anterior.
Lo que esperamos de esta serie es ver que Obi-Wan se enfrente con el Imperio, que haya una pelea épica entre él y Darth Vader, que la conclusión aunque ya la sabemos siga manteniendo esa esencia y esa esperanza de que todo esto sirva como una base más concreta a Rogue One y a la trilogía original, que de alguna manera justifiquen que toda esta super producción no es en vano ni por capricho de un estudio sino que sea algo que los fans en general disfruten y queden satisfechos.
El casting principal lo conforman Ewan McGregor, Rupert Friend, Simone Kessell, Sung Kang, Moses Ingram, Benny Safdie, Joel Edgerton, Bonnie Piesse y Hayden Christensen y lo hacen muy bien, ya conocen a estos personajes y no les es difícil seguir desarrollándolos.
La música cuenta con un tema nuevo compuesto por John Williams que sí es novedoso pero que también evoca mucho a la nostalgia de trabajos anteriores, el score a cargo de Natalie Holt (Paddington y Loki) se siente más fresco, más acorde con lo que estamos viendo, tiene lo necesario para complementar muy bien esa esencia que como música debe tener esta y otras historias.
En conclusión, estos 2 episodios de Obi-Wan Kenobi son un buen espectáculo, un entretenimiento nato para todos esos fans que queríamos ver de regreso a este personaje, como súper producción cumple más allá de las expectativas, como historia aún hay muchas cosas que contar que esperemos (una vez más) sea lo que han prometido.
Obi-Wan Kenobi ya está disponible en la plataforma de Disney +.
